Lo se pija, lo se.

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Era una mañana fría, y el instituto se llenaba de estudiantes como siempre. Ruslana, antes de salir de casa, decidió llamar a Emma para hacerle una propuesta.

—Eh, pija. Te apetece que pase por ti para ir juntas al instituto?— preguntó la pelirroja con una sonrisa en los labios, esperando una respuesta.

La ojiazul se sorprendio y respondió rápidamente —Lo siento macarra, ya viene Maria por mi en el coche de su padre.

La ojimarron, aunque un poco decepcionada, mantuvo su sonrisa y dijo— Ah vale, no pasa nada.

Emma sonrió, apreciando el gesto de la pelirroja— Nos vemos ahora.

A los pocos segundos, el coche del padre de Maria llegó y se monto rápidamente, el trayecto consistió en charlas y risas de las dos mejores amigas. Al llegar al instituto, Ruslana ya estaba en su clase de música, un poco impaciente por ver a la castaña.

Y mientras la pelirroja estaba en música, Emma se encontraba en su optativa de teatro. Mientras tanto Ruslana, en medio de clase de música, pudo observar por las ventanas del aula, a una castaña que ella reconoció muy bien ir al baño. Inconscientemente sonrió y se acercó a la profesora para pedir permiso e ir detrás de la ojiazul.

Al llegar allí, vio que la castaña estaba en un cubículo y decidió darle un susto.

—¿Pija?¿Qué haces aquí escondida?— preguntó, asustando así a la ojiazul.

Emma, desde dentro del cubículo, respondio sorprendida— ¡Ostia, que susto!, ¿Que haces aqui?— Dijo levantándose del váter.

Ruslana empujo la puerta del cubículo con una sonrisa en los labios, y Emma salió, con una mezcla se sorpresa y diversión, ambas se empezaron a reír, sentían la conexión entre ellas.— Madre mía, como has chillado.— Dijo la pelirroja divertida.

—Pues claro, que esperabas?— Emma también riendo.

Las dos se quedaron en silencio por un momento, disfrutando del momento y la atmósfera relajada. Estaban tan cerca que casi  podían oír los latidos de la otra. La cercanía hizo que se miraran fijamente, el aire se volvió más cargado.

La castaña, con una sonrisa dijo— ¿Y tu que?¿Te has perdido o simplemente has venido a darme un susto?

—No, solo quería ver que hacías. Además, me apetecía insultar un poco a la súper pija.— Respondió la pelirroja, acercándose un poco más.

El ambiente entre ellas se volvió más íntimo, y ambas se acercaron aun más, disfrutando de la cercanía. Pero justo cuando parecía que el ambiente iba a estallar, Noelia entró al baño.

Analizó rápidamente la escena y se pronunció— Hola, Rus.— exclamó Noelia, ignorando por completo a Emma, y acercándose a darle dos besos a su "ex".

La pelirroja respondió con una sonrisa— Hola Noe, ¿Que tal estas?

La ojiazul, sintiéndose completamente ignorada, se quedó esperando un saludo. Pero Noelia simplemente paso de ella y se dirigio a uno de los lavabos.

—Tanto dinero y tan poca educación eh— reprocho la castaña sintiéndose ofendida, ella era la mismísima Emma García, todo el mundo quería que ella le dirigiese la palabra, pensó.

—¿Perdona?¿Qué dijiste, Emma?— respondió la pelinegra con chulería, mientras se giraba para mirar a Emma.

—Lo que oíste guapa, ¿no te enseñaron modales en tu casa o que?— replico Emma, con la misma chulería.

—Mira, niñata, conmigo no te pases de lista— Dijo la pelinegra acercándose a Emma.

—¿Ah si?¿Qué me vas a hacer?¿me vas a pegar?— respondió Emma acercándose también.

Ruslana, en un mini shock, se interpuso entre ellas, antes de que la cosa se pusiera fea.

—¡Vale, ya está bien!, calmaos, que no es para tanto.

La pelinegra miró a la pelirroja y puso los ojos en blanco— Joder. Solo por ti eh, Ruslana. —luego lanzó una última mirada de desdén a la castaña y salió del baño.

Emma, aún molesta, se quedó en silencio por un momento. Ruslana suspiró aliviada, sintiendo que había evitado una expulsión de una semana.— ¿Estás bien?— preguntó mirando a la ojiazul con preocupación.

—Si, solo que esa me saca de quicio.

—Lo sé pija, lo sé.— Respondió ruslana, sonriendo.

Las dos chicas salieron del baño, ruslana se regreso a su clase y Emma se quedó en el pasillo un momento. Aunque la intervención había cambiado de tono la conversación, algo había cambiado entre ellas. La conexión estaba allí y les esperaba mucho más por descubrir.

BATALLA DE CORAZONES|    RUSLANA OT2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora