Potter

Capítulo 38 Encuentro

Al volver a casa lo primero que se encontró Elizabeth fue a Remus en el salón. Al verla en la entrada corrió a ella.

—Eli, por fin apareces ¿estas bien?— llevo sus manos a su rostro, junto al inicio de su cuello— ¿Que es esto?

Tocó con cuidado las marcas negras de Elizabeth, eran como si sus venas resultarán.

—Estoy bien, ¿Que haces aquí?— aparto con cuidado sus manos de su rostro.

—Le prometí a Harry cuidarte.

—Estoy bien, Remus, no necesito que alguien me cuide, deberías dedicar ese tiempo de cuidar a Harry, casi muere hoy.

—¿Que? Lo has visto ¿donde esta?

—No lo sé, solo se que está a salvo.

—Necesitamos hablar, Eli, lo que estás haciendo es muy peligroso.

—No eres mi niñera, Remus, si no te gusta lo que hago puedes irte.

Se dirigió a la escalera que iba al sótano, a su laboratorio.

—No hagas esto, no me apartes, solo intento ayudarte.

Eli se detuvo en el marco de la puerta el recuerdo de su hermano el día que la encontró en el cementerio, su mirada, él quería ayudarla, pero ella huyó.

El solo pensar que pudo pasar más tiempo con su hermano y ella prefiero huir, tal como estaba haciendo ahora. Estaban en guerra, podían morir en cualquier momento, Remus podía morir o Sirius, incluso Harry.

—¿Que tan bueno eres en pociones?

—¿Qué?—Remus parecia confundido con la pregunta— bueno, no soy un experto, pero soy bueno.

—Sera suficiente ¿Quieres ayudarme a impedir que esto me mate? — señaló sus marcas en su cuello.

—¿Vas a seguir matando mortifagos después de curarte?

—No, iré por Harry, de todas formas ya mate a casi todos sus mortifagos más leales.

Remus asintió y juntos bajaron a sótano, Elizabeth le estuvo explicando que iban a hacer, Remus se dedicó a reunir los ingredientes y cortarlos adecuadamente, mientas Elizabeth preparaba la poción.

—Ya esta, ahora solo hay que dejar que repose.

—¿Vas a ir por Harry ahora?

—No hasta que esté lista, no quiero que me vea así.

—Eli, creo que tenemos que hablar de nosotros.

—No voy a sentarme a hablar de mis sentimientos Remus, eso no va conmigo.

—No, evitarlos a toda costa es lo tuyo— hablo ya molesto Remus.

Elizabeth suspiro y dejó en la mesa los ingredientes de pociones que usaron.

—Estamos en guerra, Remus...

—Ya lo has dicho bastante veces no podría olvidarlo.

—¿Me vas a dejar terminar de hablar? se supone que es lo que querías que hiciera.

Remus le hizo una seña para que siguiera hablando.

—Estamos en guerra y estoy peleando por Harry, por ti y Sirius, porque son mi familia, no esperes que pueda a sentarme a tener charlas sobre mis sentimientos porque no es algo que haga, no voy a sentarme a decirte lo que siento, prefiero demostrarlo.

Elizabeth se acercó los dos pasos que lo separaban y unió sus labios, tomando por sorpresa a Remus, ella se apartó luego de un rato, pero Remus volvió a besarla mientras sonreía.