Las tardes allí eran muy calurosas. Al igual que las mañanas. Pero las tardes es para darse un tiro. Me llevaba mi cantimplora colgada por mi cuerpo de la calor que hacía. Después de las siestas el grupo se reunía para hablar de lo que tocaba hoy. Esta mañana nos dijieron que era el día de la "Solidaridad" aunque no estuve muy atenta de lo que explicaron. Estaba media dormida con un ojo pegao' y el otro mirando a Cuenca. Vale, estábamos los veintes alumnos en una Quiosco dónde la piscina. Había esa mesa de madera alargada y el banquillo pegado al suelo. Mientras que Roberta, Ewan y yo cogimos tres sillas poniéndonos al principio de la mesa. Claro esta que puse una sombrilla debajo de nosotros tres. Por lo menos a mi no quería que me diera el sol.
Roberta tan monitora veterana se ponía hablar como un loro. Ella no se escuchaba pero los demás si y muchos de los chicos se estaban riendo aunque ella no se diera cuenta.
—Terminada mi explicación, ¿Que es la solidaridad chicos?.— Preguntó Roberta después de todo el rollo que había soltado anteriormente.—
—Darle condones a un colega si le hace falta.— Decía uno tan bromista. Los demás le hacia la gracia riéndose de la broma.—
—No precisamente chiquito.— Dijo Roberta fingiendo su risa, estaba de mala leche ante la respuesta de ese niño.—
—Solidario es darle a alguien algo que le hace falta como comida, dinero o ropa.— Dijo una chica diciendo la respuesta correcta.—
—Es exactamente lo que ha dicho esa chica, o también alguien qué le haga falta algo no tiene que ser pobre tampoco.— —Condones.— Repitio el chico anterior. Esta vez los demás se rieron más ante su gracia francamente estúpida.—
—Eh tú, para con esas bromas o te vas a la cabaña.— Dijo Ewan seriamente inclinándose un poco hacia la mesa mostrando su enfadó.—
El chico se había callado ya que se había acojonado. Pero otro estaba saltando al ataque. Madre mía.
—Chaval no te calles por qué te diga eso un musculitos, echale cara.— Decía el pervertido de Bart diciendo con coraje ya qué le caía mal.—
—Deja al monitor Ewan tranquilo eso es lo que tu quisieras apestoso, tener su cuerpo.— Contesto una de las chicas que se había sentando en la mesa de comer por Ewan. Su grupito la estaba apoyando.—
—¡Yo que voy a querer su cuerpo pinchado!.— Dijo Bart actuando como un imbécil mientras se levanta de el banquillo un poco.—
—¡Que dejes en paz a Ewan!.— Decía varias chicas defendiéndole.— Rodaba mis ojos al ver esa patética situación. Me estaba muriendo de calor y esta gente peleándose. ¿Por qué Dios? ¿Por qué?.
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Ahora ellas son los chicos.
HumorElizabeth Hardwicke tiene unas amigas que están harta de que se rían de ellas. Siempre juegan y la tratan como un trapo sucio. A diferencia de Elizabeth que es ella quién juega y trata a quién quiera. Ellas siempre acaban con el corazón roto. Cuando...