capitulo 24: Alex en la Cárcel
El sonido metálico de las puertas de la cárcel al cerrarse resonaba en la mente de Alex Montero como un eco constante de su confinamiento. Llevaba semanas encerrado, y cada día que pasaba sin noticias de su hermana Lucía aumentaba su desesperación. Sabía que Lucía estaba haciendo todo lo posible por probar su inocencia, pero el tiempo parecía avanzar sin piedad.
Alex había sido acusado injustamente del asesinato de Gabriel Delacroix, y aunque proclamaba su inocencia, las pruebas circunstanciales y la presión mediática habían sido suficientes para mantenerlo tras las rejas. Su abogado, Manuel Ortega, le había prometido que estaban trabajando en una apelación, pero Alex no podía evitar sentirse atrapado en una pesadilla sin fin.
La vida en la cárcel era monótona y dura. Alex pasaba sus días leyendo libros viejos que encontraba en la biblioteca de la prisión y escribiendo cartas que nunca enviaba. Sus compañeros de celda eran una mezcla de criminales endurecidos y hombres desesperados como él, esperando una oportunidad de redención.
Un día, mientras hojeaba un libro, un guardia se acercó a su celda.
—Tienes visita, Montero —dijo el guardia, abriendo la puerta con un chasquido.
Alex se levantó rápidamente, con la esperanza de que fuera Lucía. Fue llevado a la sala de visitas, donde se encontró con su abogado, Manuel.
—Manuel, ¿hay alguna novedad? —preguntó Alex, sin poder ocultar su ansiedad.
Manuel se sentó frente a él y suspiró. —Estamos trabajando en ello, Alex. La situación es complicada, pero Lucía está haciendo un gran trabajo investigando por su cuenta. Ha encontrado algunas pistas sobre Adrián Morales y Julien Dubois.
Alex frunció el ceño. —¿Adrián y Julien? ¿Qué tienen que ver ellos con todo esto?
—Parece que hay más de lo que pensábamos. Lucía ha descubierto que tienen una relación sospechosa con la muerte de Carolina Vidal. Pero eso también la ha puesto en peligro —dijo Manuel, mirando a Alex con seriedad.
El corazón de Alex se hundió. Sabía que su hermana era valiente, pero la idea de que estuviera en peligro por intentar ayudarlo le resultaba insoportable.
—¿Qué puedo hacer desde aquí? No puedo permitir que Lucía se arriesgue de esta manera —dijo Alex, golpeando la mesa con frustración.
Manuel colocó una mano tranquilizadora sobre la de Alex. —Confía en ella, Alex. Es inteligente y determinada. Mientras tanto, necesitamos más pruebas para tu caso. ¿Recuerdas algo más sobre la noche del asesinato de Gabriel? Cualquier detalle podría ser crucial.
Alex cerró los ojos, tratando de recordar. La noche en cuestión estaba borrosa en su mente, un torbellino de emociones y confusión.
—Sigo pensando en esa noche, Manuel. Había una discusión, pero no puedo recordar nada que sugiera que alguien estaba planeando matarlo. Gabriel estaba nervioso, eso sí, pero no puedo precisar por qué —dijo Alex, frustrado.
Recuerdo como todo se tornaba gris. Y, cuando fuimos al restaurante nos encontramos con toda la escena ahí si mas.
Después de la visita de Manuel, Alex volvió a su celda, sintiéndose algo aliviado por las noticias sobre la investigación de Lucía, pero aún preocupado por su seguridad. Cada noche, pensaba en su hermana y en todo lo que estaba arriesgando por él. Escribía cartas para ella, tratando de darle ánimos, aunque nunca sabía si las recibiría.

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El Lector
Mystery / ThrillerGabriel león es un renombrado autor de thriller psicológico, admirado por millones de seguidores.Pero acosado por la presión de mantener su reputación. Su ultima novela ha dejado insatisfechos a críticos y lectores, sumergiéndolos en una espiral de...