Lo quiero todo - Ereri (adaptación)

CAPÍTULO 40

- Jean quiso rechazar mi regalo. - comentó el omega en el asiento del copiloto del coche deportivo del alfa. - Le dije que si lo rechazaba dejaríamos de ser amigos.

- Lograste salirte con la tuya entonces. - comentó con humor al ver como el alfa del que hablaban miraba el coche rojo con los ojos y boca abierta. - ¿Sabes? Armin llegó gritando hoy a mi oficina que quiere y, según él, necesita tener sexo con Jean, pero que él se frena cuando pareciera que va a pasar algo más.

- Jean es virgen. - comentó simple, sonriendo al escuchar la exclamación del alfa a su lado.

- Estas jugando... - tentó el mayor, poniendo en marcha el coche para salir del estacionamiento. - Pero si tiene 25.

- Quiso guardarse para la persona indicada. - murmuró mientras avisaba al detective que iban en camino a la comisaría donde habían sido citados.

- Wow... Es como un alma vieja en pleno siglo 21. Yo tuve sexo con mi primera novia al poco tiempo.

- Yo no. - Levi sonrió cuando un gruñido bajo salió de la garganta del mayor, sabiendo que probablemente lo había imaginado en los brazos de otro. - Recuerdo que mi primer novio intentaba e intentaba pero lo rechacé siempre...

- Pero con él fue tu primera vez ¿No?

- Sí, pero lo hicimos cuando yo quise... como todas las primeras veces, no fue tan buena, pero el chico le puso ganas porque lo tuve con bolas azules durante meses.

- Yah... Cambiemos de tema.

- Tu hablaste de tu primera novia primero. - dijo divertido, acariciando la mano entrelazada con la suya. - ¿Por qué nos habrán llamado?

- No lo sé... Lo sabremos cuando lleguemos.

Siguieron hablando de cosas triviales, de su primer día luego de un mes, casi volviendo a la rutina de antes sino fuera por una pequeña sensación en sus pechos que cada vez era más ligera, el dolor siendo conquistado por el eterno amor que le guardarían a su cachorro no nacido.

Entraron con sus manos unidas a la comisaria en donde el oficial Smith los esperaba. Se saludaron como correspondía y fueron guiados hacía su oficina. En donde fueron comunicados que atraparon a un hombre con la descripción que el omega había entregado del único hombre que había podido ver. Eren le preguntó a su omega si estaba listo para hacer una prueba de reconocimiento, atento a lo que su omega dijera y el cómo se sintiera. Levi supo de inmediato que quería hacerlo y que estaba listo.

El azabache miraría a casi 20 hombres que pasaban en grupos de 5, nunca dejó de ser abrazado por la espalda por su alfa, quien sintió como el pequeño cuerpo entre sus brazos se tensó cuando el tercer grupo entró a la sala.

- Es el de en medio. - avisó el omega, suspirando al sentir los brazos de su chico tensarse al conocer uno de los que atacaron a su familia.

- ¿Seguro?

- Completamente. - aseguró el azabache, suspirando cuando el hombre fue sacado de la sala con sus manos esposadas hacía una sala de interrogación, con una mueca arrogante que sería borrada por él. - Oficial, Smith ¿Podría entrar a hablar con aquel hombre por unos minutos?

- No sé si sea lo mejor.

- Levi. – Eren lo observaba con duda.

- Por favor, hágalo como un favor hacía un colega de la ley, por favor.

- 5 minutos.

- Gracias. - Eren siguió al omega sin decirle nada, sabía que si su novio hacia algo era porque así lo quería o necesitaba, él se quedaría al otro lado del vidrio, monitoreando lo que pasaría en la sala donde el desgraciado esperaba divertido al policía que lo interrogaría, sorprendiéndose cuando vio entrar a un chico que conocía claramente. - Señor Kendo. - dijo el azabache mientras tomaba asiento frente al hombre esposado.