𝑩𝒆𝒔𝒕𝒊𝒆𝒔 - ʸᵒᵘⁿᵍ ᵐⁱᵏᵒ

✵ 𝘊𝘩𝘢𝘱𝘵𝘦𝘳 24 ✵

Domingo 𖦹 28 𖦹 Julio 𖦹 2024
✲ 𝙉𝙖𝙧𝙧𝙖𝙙𝙤𝙧𝙖 ✲

Ya había llegado el día más esperado por Sofía.

Al fin compraría un hámster, junto a Victoria, que también estaba contenta por ello, pero su mente andaba en que en solo unos días sería el primer concierto de el XOXO tour en Denver.

Ese sí que sería un día esperado para ella, aunque este también lo era.

Sofía despertó cuidadosamente a la pelirroja que dormía plácidamente, acurrucada a ella. 

   — Vicky —susurró para que se despertara, moviéndole un poco el brazo—... Vicky —la volvió a mover.
   — ¿Mh? —murmuró adormilada.
   — Hay que levantarse, amor.
   — No —murmuró—, tengo sueño —se aferró más a la cintura de la otra, acomodándose.
   — Pero ya son las diez, Vick.
   — No me importa, quiero dormir.
   — Yo igual, pero hay que levantarse.
   — Mmh —asintió aún sin abrir los ojos.

Parecía un osito cariñosito.

   — Y yo que te iba a hacer panqueques —dijo para convencerla, de inmediato Victoria abrió los ojos y la miró con los ojos achinados.
   — Me levanto en un segundo, déjame despertarme, sigo dormida —su voz era un poco más ronca, pero no tanto, y bajita por no poder sacar más la voz.
   — Bueno —sonrió victoriosa—. Yo me voy a levantar.
   — Mhum.

Se levantó, su novia siguió ahí tirada, luchando con no volver a cerrar los ojos para caer en el sueño.

Se acomodó mejor el pijama que se le había desacomodado mientras dormía.

Paró en seco antes de salir de su habitación.

   — Amor —llamó a su novia.
   — ¿Mh?
   — ¿Preferí' waffles o panqueques?
   — Ehm —se puso a pensar, la miró—... waffles —sonrió mostrando todos los dientes.
   — Ya.

Victoria unos minutos después se levantó, sin querer se había quedado dormida por unos minutos.

Había dormido demasiado bien como para poder dejar de hacerlo, dormir abrazada a su novia era lo que más le gustaba.

En la noche se habían acostado juntas para ver una serie, aunque no duró mucho porque una se quedó dormida abrazando la cintura de la otra.

Victoria.

Quien ahora ya se encaminaba a la cocina, en busca de Sofía y de comida. Ya vestida con otra ropa y aseada.

Mariana ayudaba a Sofía con los waffles, así que fue a saludar a las dos.

(...)

   — Vicky, ¿sabes qué día es hoy? —le preguntó la pelinegra a su novia.
   — Mmh, ¿28?
   — O sea, sí, pero aparte de eso. Hoy pasa algo importante.
   — Tú cumpleaños no é', ya pasó. Así que me rindo.
   — Hoy tendremos un hijo, o hija —la pelirroja abrió tanto los ojos que casi se le salen, sorprendida por las palabras de la oji-verde, sin entender.
   — ¿Cómo, perdón? —pensó que quizás había escuchado mal.
   — Que hoy tendremos un hijo.
   — No, no —negó rápidamente—. Sofía, no estoy lista.

La chilena rodó los ojos y se rió.

   — Sí, ya me lo dijiste la otra vez —Victoria trató de recordar, pero nada—. Se supone que hoy iríamos por el hámster, Vicky —ahí cayó en cuenta de que se refería a un hijo mascota.
— Aaah, un hámster... Sí, hoy vamos.
— ¿Tú pensaste que era un niño? —se burló.
— Sí, me había asustado
— Noo, nunca tanto —dijo entre risas.
   — Y sí, yo aún no quiero nenes, aún soy muy joven, bebé.
— Y yo igual. Aunque pasados los cuarenta yo no pienso tener hijos.
— ¿Por?
— Porque luego ellos recién con cinco años y yo toda una vieja, amor.
— Eso es lo de meno', tú siempre va' a ser hermosa.
— No tiene nada que ver —sonrió.
— Da igual —atacó sus labios con un profundo beso.