La amenaza bajo el mar (Borrador)

Capítulo veintidós

Eirik

Mis consejeros y yo estados discutiendo que decisiones son mejor tomar. La verdad es que tanto yo como ellos estamos muy preocupados por el rumbo que están tomando las cosas.

-Cada vez hay más buzos acercándose mucho a las barreras mágicas de protección, están yendo hacia donde el primer buzo fotografió a la imbécil de Poppy. -Gruñe Selioth, el consejero más viejo de los que habemos reunidos aquí.

-Mientras las barreras mágicas estén activadas no hay ningún problema. Lo que más me preocupa ahora es la zorra de Helga, esa no se va a limitar solo a tener su virreinato, siento que va a usar a mi hijo para tener más poder. -Ladro furioso.

-Por eso lo más sensato majestad, es que envie a su hijo Will como pupilo de Helga, usted sabe que está encaprichado de Morgan por lo cual Helga pensara que el motivo de que él quiera ser su pupilo es para estar cerca de su gran amor. Será un espía. -Aconseja Jephoas, tintineando su montón de collares y pulseras conforme habla.

El plan es inteligente debo de reconocerlo, pero, mis celos me nublan la mente y me jode que ese sinvergüenza tenga la oportunidad de poder quitarme a mi chica. Morgan, solo pensar su nombre deseo acariciarla por todas partes, inundarla de joyas y regalos, besarla. La amo. Estar sin ella me está matando, pero como rey finalmente elijo la opción mejor para el papel tan importante que desempeño para mi reino.

-Perfecto, que los guardias lo escolten inmediatamente hacia allá. Espero que esta vez el chico no nos falle. -Doy mi aprobación y finalmente ellos se van dejándome solo en mi pesar.

Me harto de licor hasta nublar mis sentidos, solo quiero sacármela de la cabeza, me estoy volviendo loco. Desde la muerte de Myrela me juré no volver a enamorarme para no sufrir más, pero llegó Morgan y todo cambió. Sé que no es  la mujer más apropiada para mí, pues pertenece al enemigo pero la amo.