Amor Indeseable

🥀 Medialuna 🥀

– Yo … ¿Te conozco? – Dijo el chico al verme frente a él actuando como si le conociera de toda la vida.

En ese momento mi cuerpo se paralizó, al igual que mi rostro, pues ningún gesto pudo ser visible. Me mantuve de esa manera frente a él un par de minutos por el impacto que la pregunta había causado en mí.

Realmente en mi mente no estaba la posibilidad de recibir esa pregunta, me había convencido de quién era él y que sabía quién era yo.

Entonces...

« ¿Porque está preguntando eso? Claro que me conoces… oh.... »

Ahora estaba avergonzada, lo más seguro era que en mis locas reflexiones debía de haberme equivocado y ahora estaba haciendo el ridículo frente a esta persona que talvez nunca en su vida me había visto.

« Ahora que lo pienso, fui muy descuidada con mis suposiciones. Aún cuando lo pensé tanto, ahora pienso que solo llegue a la conclusión a la que quería llegar por inercia. No porque realmente eso era lo más probable..

¿como podría fiarme solamente de su posible "igual" altura y que fuera el único que sonriera hacía mí como para asegurar que era la misma persona de aquella noche?

Eso fue tonto de mí parte, realmente muy tonto, pero ahora que estoy en esta situación ya no hay vuelta atrás. »

– El parque de Lashville hace unos días… salí de casa por la noche y, yo te conocí ahí .… Aunque ahora no se si me equivoco… – Una risa apenas audible salió de mi boca mostrando un poco de incomodidad y vergüenza en su tono, mientras permanecía mirando con tanta pena al chico quien negaba con la cabeza.

– No he sido yo, lo siento... No conozco ese parque, nunca he ido por allá…

– Oh, es así? Creí que lo eras.. es sólo que esa persona me apoyó ese día y cuando te vi en la mañana… yo pensé que tú...

Aquél chico permanecía con su mirada en la mía, incluso sucedía que por más que bajara la cabeza el trataba de no verme por encima. – En realidad ya te conocía pero de aquí en el instituto, veo que te va algo mal con todos…

Apenas lo escuché mí mirada se alzó un poco, asintiendo por un par de segundos.

« Me conocía, por algo así. Realmente era algo evidentemente obvio, no podría ser por otra cosa.. no es como si me destacará por mí buena vida y convivencia con las personas de la escuela »

– Si, yo…  – Suspiré profundamente, no tenía cara para responder y además, igualmente la respuesta que recibiría no era nada agradable de decir ni de escuchar.

Ante la mirada atónita y aún confundida de sus amigos el se acercó a mí con pasos sigilosos y acarició mi cabeza cual si tratara de consolar a un pequeño cachorro triste e indefenso.

– Todo irá mejorando, lo estás intentando...

Alcé levemente la cabeza dirigiendo mi mirada cabizbaja hacía él, notando que había más que solo una pizca de sonrisa tierna en su rostro al verme. – Gracias.. Lo seguiré haciendo, seguiré intentando.

– No es nada. – Su sonrisa se transformó completamente a una gran sonrisa al verme mostrar una sutil sonrisa ante él –Ahora si nos disculpas, mis amigos y yo tenemos que irnos o no alcanzaremos a entrar a clases y nos dejarán afuera

Asentí rápidamente al darme cuenta por sus palabras que la hora de descanso estaba a punto de terminar. – Lo lamento, te quité tu tiempo y el de tus amigos...

Aún con su mano en mi cabeza movió suavemente mi cabello mientras reía, para después volverlo a acomodar con delicadeza. – Todo está bien, no te preocupes por eso. Háblame cuando quieras, está bien? Por ahora nos tenemos que ir, te veo después

Apenas terminó de hablar alejó su mano y moviéndola de un lado al otro se despidió de mí. Caminó hacía sus amigos y comenzó a arrastrarlos de vuelta al aula.

En ese momento estaba pasmada, sin palabras, tanto que no me había dado cuenta que ni siquiera sabía su nombre aunque hablé tanto con él.

« ¿Le pregunté? ¡¡No, tampoco le dije mi nombre!! Jane, realmente eres imposible »

– Eh!!… Oye, Soy Jane por cierto! ¿¿Cuál es tu nombre??

Al escuchar el prácticamente grito él se dió la vuelta volviendo su mirada nuevamente hacía mí. – Daniel, me llamo Daniel. Gusto en conocerte Jane

Siguió su camino, sus amigos parecían insistentes con preguntas y bromas hacía el mientras se alejaban frente a mí.

« Daniel, se llama Daniel. ¿El dijo que fue un gusto? Si, eso no me lo pude haber inventado. Realmente lo escuché claramente.

¿Finalmente tengo un amigo?

Talvez esta vergonzosa equivocación, no fue tan mala después de todo »

Después de la fuerte lluvia en el cielo, hay gran posibilidad de ver un bello arcoiris que de color a los días..

Talvez él, será mi arcoiris..

Quién dará color a mi monocroma y lamentable existencia..