Capítulo 5

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First no podía evitar la sensación de que había cavado su propia tumba.

Había insistido en que la banda no se retirara de la actuación y tocaran según lo previsto.

Había llamado a Bank Phooprasert. Siendo amigo del otro guitarrista, Bank era una de las pocas personas que podía traspasar la reticencia social de First. Contribuyó a ello el que los dos se reconocieron mutuamente como músicos obsesionados por su arte.

Bank estaba junto a Perth, con los ojos cerrados, a cabeza baja y componiendo un poco la melodía que tocaría en lugar de First con Orot Sawan. Su voz sonaba muy bien. Su fondo era más de heavy metal punk¹ donde First era rock estilístico² pero Bank, como First, era un  puro entusiasta de la música. Y un guitarrista muy bueno. Podía tocar cualquier cosa, y lo demostró ahora, de pie sobre el escenario del teatro con el resto de Orot Sawan a su alrededor. Ellos hicieron el trabajo maravillosamente. Sonaba diferente, pero sonaba bien. First se había preocupado. Ahora no lo estaba. La banda tenía un guitarrista suplente adecuado.

First se sentó en un asiento de la fila cuarta el pasillo de la sección de la orquesta, en el Teatro Nacional. El teatro no era demasiado grande pero podría albergar a más de dos mil quinientas personas mañana por la noche. 

Era un espacio renovado, tan reciente que First no estaba seguro de si todavía podía oler la pintura nueva en las paredes. Los iluminadores estaban en el escenario y había un montón de técnicos que vagaban alrededor, señalando lo que parecía ser la mejor iluminación. La acústica no era mala, sin duda, Orot Sawan había tocado en lugares más pequeños y peores. No recientemente, pero había pasado.

El dueto Saving Paradise, de guitarra de Bank y las armonías de los teclados de Khao llenaron el espacio y First se debatía entre el burbujeante orgullo de su banda y su música y sumirse en una depresión debido a que tocaban bien sin él.

¡Maldita sea, Bank incluso se parecía a uno de ellos! First no era indispensable para la banda pero no podía estar a la altura como miembro de Orot Sawan sin ser muy consciente de la apariencia.

Bank encajaba muy bien. Era alto, con delgados y elegantes músculos, como Judo, un brillante pelo castaño cortado a los lados y un poco largo y espigado en la parte superior, y tenía una cara fuerte y esculpida. Era el observador de su reciente banda Xạṣ̄win d̊ā³ y conocía los enredos de los estridentes fans masculinos y femeninos.

Xạṣ̄win d̊ā³ acababa de separase o, como lo expresó Bank, ellos estaban en un punto muerto. Bank vivía Phuket, se fue a la ciudad cuando First lo llamó por la tarde y él y Khao llegaron. Ahora era treinta de diciembre y Bank estaba aquí y sonaba muy bien sin preocupaciones para el concierto de la víspera de año nuevo.

Perth se echó a reír tan pronto como la música se acabó, colocando el micrófono en su soporte.

-Joder, chico.- Se giró a Bank-. Te sabes la canción.

Bank se echó a reír, pasando los dedos a través de su pelo corto y revuelto.

-Maldición, sé todas vuestras canciones. Tocamos algunas en los ensayos de Xạṣ̄win d̊ā³. Es una buena práctica.

Judo le sonrió a través del escenario, sus largas manos descansaban sobre el bajo colgado al hombro.

-¿No jodas? Afortunadamente First te llamó.

Bank desplegó una radiante sonrisa.

-Yo soy el afortunado. Este será el mejor año nuevo que he tenido en mucho tiempo. Te lo debo.- Señaló a First con un pulgar hacia arriba.

Los Xạṣ̄win d̊ā³, si bien eran una banda muy conocida en un buen número de ciudades importantes, nunca habían tocado en estadios o en grandes eventos. Esta oportunidad de ser visto con Orot Sawan haría maravillas a la carrera de Bank, así como a los Xạṣ̄win d̊ā³, si es que alguna vez volvían a juntarse.

Tn kāneidDonde viven las historias. Descúbrelo ahora