Capítulo 38

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Ocean

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Ocean

Último concierto de la banda | parte dos.

He estado buscando a California y a Essie en toda la fiesta. El concierto acabó hace dos horas y ninguna de las dos aparece. Me preocupa que algo les haya ocurrido. Me sorprende que California no estuviera cuando bajamos del escenario como normalmente lo hace, además se me hace raro que no haya estado presente conociendo el tema de Oliver y lo importante que es para ella. La he llamado muchas veces, sin embargo, no he tenido respuestas.

—¿No las has encontrado? —le pregunto a Austin desesperado.

—No, un compañero dice que las vio a las dos hace una hora, pero que no las ha vuelto a ver desde que salieron. ¿Dónde pueden estar?

Llevo mis manos a la cabeza, no me perdonaría que algo les sucediera a las dos. La isla no suele ser un lugar peligroso, pero cuando hay este tipo de eventos, donde entran muchas personas, es muy normal escuchar anécdotas que no quiero imaginar. No he podido verla durante el concierto porque estuve concentrado en la salud de Oliver, así que no puedo imaginar dónde están.

—¿Se habrán ido a casa? —cuestiono. —No, no, California no lo haría. Ellas deben estar acá. ¡Tenemos que buscarlas!

—Debes tranquilizarte —me dice Oliver, acercándose. —Ya aparecerán, tal vez fueron a comprar algo.

—No. En VIP tenían todo, ellas no salieron por esa razón, algo debió pasarles. Pregúntales a los guardias si salieron del evento...

—¿No las viste durante el concierto? —me pregunta Austin. Su tono de voz también es de preocupación.

—No —niego. —Pensé que estarían contigo.

—No. Estuve pendiente de la salud de Oliver, no las vi en todo el concierto... Voy a seguir buscando.

Me dice Austin a punto de salir por la puerta, sin embargo, en ese instante, California entra tropezándose con sus pies. Su cuerpo está débil y no tiene equilibrio. A su lado está un chico que la sujeta por los brazos intentando que no caiga. La situación es muy confusa, pero lo único que soy capaz de hacer es ir corriendo a su lado, abrazarla, y levantarla del suelo sintiendo que respiro nuevamente. Estaba muy asustado.

—Maldita sea, California. ¿Dónde estuviste? Estaba tan preocupado por ti. ¿Qué te ocurrió?

Sin dejarla de abrazar, miro al chico que antes la sostenía. Nunca lo había visto y me preocupa que les haya hecho daño. Detrás de ellos viene Essie con otro chico.

—Ella está bien, solo ebria —me dice ese chico con mucha tranquilidad.

Me separo un poco de ella, pero su cuerpo está demasiado flojo, pareciera que se hubiera tomado todo el alcohol de la fiesta.

—¡¿Austin?! —llamo su atención, sabiendo que es el único que puede ayudarme. —Sujeta un momento a California. Está muy débil... —le digo pasándole el cuerpo de California, quien solo se está riendo de la situación.

Solo si me recuerdas mañanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora