𝙼𝚒 𝚙𝚎𝚚𝚞𝚎ñ𝚘 𝚕𝚘𝚋𝚘 𝚌𝚘𝚗 𝚙𝚎𝚌𝚊𝚜

>[PEQUEÑO LOBO DOMINANTE]<

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El día de su 17º cumpleaños, Ace descubrió que era un Omega dominante, una casta rara y poderosa, y se le reveló su marca de alma gemela: un fénix azul rodeado de llamas moradas. La marca de su hogar, el emblema de los piratas de Barba Blanca, también se mostró claramente en su piel. Aunque la marca del fénix azul le recordaba a los Barba Blanca, Ace no deseaba que su verdadera identidad se conociera. Así que, decidió cubrirla con vendas para mantener su destino en secreto.

Dadan, su cuidadora, observaba con mezcla de admiración y preocupación. "Ace," dijo con voz temblorosa, "tu marca es impresionante, pero recuerda que un Omega dominante como tú enfrenta desafíos únicos. El mar puede ser despiadado y más si tú marca de hogar es el emblema del hombre más fuerte del mundo Barba blanca."

Ace, se giró hacia ella con una sonrisa decidida. "No importa si soy Omega dominante. Mi marca muestra que estoy destinado a grandes cosas. Estoy listo para enfrentar cualquier desafío y me importa una mierda marca de hogar no necesito una su voy hacer mercenario."

Sabo y Luffy, sus hermanos de juramento, también estaban preocupados. "¿Estás seguro de esto, Ace?" preguntó Sabo. "El mar es peligroso y tu casta y la marca de hogar puede complicar las cosas."

"No te preocupes por mí," respondió Ace. "Mi casta me recordara que necesito ser fuerte para lo que quiero ser. No voy a dejar que nada me detenga."

Dadan le entregó un collar de perlas rojas como el que ella llevaba siempre consigo en su cuello. "Lleva esto contigo como un recordatorio de nuestra familia y de quién eres. Te queremos mucho, Ace."

Con el collar en su cuello y su decisión más clara que nunca, Ace subió a su barco. Miró una última vez hacia la isla, viendo a sus seres queridos con una mezcla de tristeza y orgullo. Estaba listo para embarcarse en su viaje hacia el Nuevo Mundo, decidido a probarse a sí mismo y a cumplir su sueño de convertirse en un mercenario famoso.

Tras despedirse de Dadan, Ace zarpó hacia el mar, con la determinación de forjar su propio camino como mercenario.

En una de sus primeras paradas, Ace exploró una isla densa y cubierta de vegetación. La isla parecía desierta, pero Ace, guiado por un instinto inexplicable, se adentró en la selva. Mientras caminaba entre los árboles, tropezó con una cueva oculta entre la vegetación espesa. La entrada estaba parcialmente oculta, y Ace sintió una presencia en el interior que lo atrajo.

Dentro de la cueva, Ace encontró un altar de piedra adornado con antiguos símbolos. En el centro del altar había una fruta extraña, con un aspecto vibrante y llamativo. Era una fruta del diablo, la Mera Mera no Mi, de tipo Paramecia. Su piel era de un rojo intenso, con una apariencia que evocaba las llamas.

Sin dudarlo, Ace tomó la fruta y la examinó. Recordó historias sobre los poderes que conferían las frutas del diablo y se dio cuenta de la magnitud de su hallazgo. Tras un momento de indecisión, Ace tomó un bocado de la fruta. Al instante, una oleada de calor y energía recorrió su cuerpo, y sintió cómo su habilidad para manipular el fuego se activaba.

Con el nuevo poder del fuego en sus manos, Ace continuó su exploración por la isla, probando sus habilidades y adaptándose a la nueva fuente de poder. Enfrentó y derrotó a varios depredadores que intentaron atacarlo, utilizando sus llamas para protegerse y para controlar su entorno.

Un día, mientras navegaba por una isla cercana, Ace descubrió un pequeño grupo de piratas que estaban en problemas. Habían sido capturados por una banda rival y estaban a punto de ser ejecutados. Ace, usando su nuevo poder de fuego, se infiltró en el campamento enemigo y liberó a los prisioneros. Esta acción le permitió ganar la confianza y la amistad de los piratas, quienes lo ayudaron a conseguir información valiosa sobre las rutas marítimas y los peligros que podía encontrar.

A medida que Ace avanzaba, cada isla y cada encuentro le ofrecieron nuevas oportunidades para probar sus habilidades y aprender más sobre el mundo que lo rodeaba. Su dominio del fuego y su creciente experiencia en combate lo prepararon para los desafíos futuros.

En una de sus paradas de su recorrido hacia el nuevo mundo donde era una fría tarde invernal, Ace llegó a una montaña cubierta de nieve, guiado por rumores sobre una poderosa tripulación de piratas que se encontraba en la región. La búsqueda lo llevó a una cueva oculta entre las rocas y la nieve. Dentro, encontró a la tripulación de Shanks, rodeada de antorchas que daban calidez al lugar.

Shanks, al notar a Ace, se levantó y se acercó con curiosidad. "¡Hola! ¿Qué hace alguien como tú en una cueva en medio de esta tormenta?"

Ace, con su rostro parcialmente oculto por la capucha de su abrigo, se inclinó en señal de respeto. "Shanks, vine a agradecerte por salvar a mi hermano Luffy de aquel rey marino hace años. Fue un acto valiente y quise agradecerte personalmente."

Shanks, al ver a Ace cubierto en parte y notando el esfuerzo de este por ocultar algo, decidió no indagar más. "Luffy es un buen chico. Me alegra que esté bien. No era necesario que vinieras hasta aquí para agradecérmelo, pero aprecio el gesto."

"Quería hacerlo en persona," respondió Ace. "Además, me gustaría pedirte que me entrenes. He estado mejorando por mi cuenta, pero creo que podría aprender mucho de ti y tu tripulación."

Shanks asintió, sonriendo. "Claro, será un placer. Ven, únete a nosotros. Vamos a comenzar con el entrenamiento."

Durante las semanas siguientes, Ace se integró a la vida en la cueva, recibiendo entrenamiento intensivo de Shanks. La relación entre ellos se fortaleció, y Shanks, en tono cariñoso, comenzó a llamarlo "lobito con pecas," sin saber el significado completo de la marca que Ace ocultaba.

Ace, mientras tanto, mantenía su marca de fénix azul cubierta con vendas, escondiendo también el emblema de los Barba Blanca. Aunque disfrutaba de su tiempo con la tripulación y del entrenamiento recibido, permaneció en el anonimato sobre su verdadero origen.

La cueva invernal se convirtió en un lugar significativo en la vida de Ace, donde forjó una nueva identidad y fortaleció sus habilidades bajo la tutela de Shanks. La relación entre Ace y Shanks creció con confianza y respeto, con Ace llamando a Shanks "tío," mientras mantenía en secreto su destino y sus conexiones con el pasado.

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Wiiii segundo capítulo de esta historia que les pareció está buena está mala le faltan cosas si falta algo no duden en decirme ya que eso me ayuda en mejor en los siguientes capítulos :3

Muchas gracias por leerla! Y también por su voto hacia está historia!

Sin nada más que decir coman bien y tomen mucha agüita 🦔!

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