Un Unico Deseo

Digerir

La alarma marco la hora, exactamente a las 9:00 AM, sin muchos ánimos solo subió la mano para apagarla y luego simplemente se despertó.

Miro a su alrededor, todo estaba en silencio a excepción del ruido provocado por sigma y Nikolai, la curiosidad le ganó y se levantó de la cama, sus ojos estaban muy rojos por todo el llanto se le complicaba abrirlos.

Antes de salir a la sala se dio un rápido baño con agua caliente, después de que terminó se colocó su uniforme encima, se desenredo el cabello y tomó camino.

Su mirada ya no era la misma de antes, incluso al caminar dirigió su mirada a la cuna, donde antes ahí hacia dormir a Anthony y que ahora sólo eso era un recuerdo, uno que nunca va a volver.

Sigma le cocino cangrejo para que al menos se fuera con algo el estómago, aunque Dazai casi no tocó el plato.

-𝘿𝙖𝙯𝙖𝙞..—El levantó la mirada a dirección.

—¿𝙎𝙚𝙜𝙪𝙧𝙤 𝙦𝙪𝙚 𝙦𝙪𝙞𝙚𝙧𝙚𝙨 𝙞𝙧 𝙖 𝙩𝙧𝙖𝙗𝙖𝙟𝙖𝙧?...—

Esa pregunta parecio sacar de sus pensamientos a Dazai, que dejó caer los palillos para responder.

—¿Qué me ganó con deprimirme? Eso no traerá de vuelta a mi Anthony...—

Dirigió su mirada al suelo.

Nikolai y Sigma se miraron, pero ninguno dijo nada.

—No me voy a desquitar con ustedes porque.. No tienen la culpa, pero es mejor que salga al menos a mi trabajo, no me ganó nada con... Atormentarme más..— Siguió comiendo de poco a poco.

—𝖭𝗈 𝗉𝗎𝖾𝖽𝖾𝗌 𝗆𝖺𝗇𝖾𝗃𝖺𝗋 𝖺𝗌𝗂́ 𝖣𝖺𝗓𝖺𝗂, ¿𝗆𝖾 𝖽𝖾𝗃𝖺𝗌 𝗊𝗎𝖾 𝗍𝖾 𝗅𝗅𝖾𝗏𝖾 𝖺 𝗍𝗋𝖺𝖻𝖺𝗃𝖺𝗋 𝖺𝗅 𝗆𝖾𝗇𝗈𝗌?—Nikolai lo miro con los dientes apretados.

Dazai ante esta sugerencia solo le dijo que si con la cabeza.

—𝙉𝙞𝙠𝙤𝙡𝙖𝙞...—Este mismo lo interrumpió.

-𝖳𝗋𝖺𝗇𝗊𝗎𝗂𝗅𝗈, 𝗂𝗋𝖾́ 𝖼𝗈𝗇 𝖼𝗎𝗂𝖽𝖺𝖽𝗈, 𝗉𝗋𝖾𝖿𝗂𝖾𝗋𝗈 𝗊𝗎𝖾 𝗌𝖾 𝖽𝖾𝗌𝖺𝗁𝗈𝗀𝗎𝖾 𝖾𝗇 𝗆𝗂 𝖼𝗈𝖼𝗁𝖾-

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Todo el camino estuvo en silencio, para Dazai se le hizo eterna la llegada a su trabajo, se limpio la cara con una toalla húmeda, por una parte sabía que lo rojo de sus ojos no se le iba a quitar pronto, y que tal vez sus compañeros le preguntarian que sucede, (a excepción de uno ciego) pero por otra parte quería pasar desapercibido.

—Nikolai...—Dazai volteo a su lado.

—¿De verdad soy culpable de lo que pasó?—Se cruzó de brazos.

La piel de Nikolai se puso tensa y apretó el volante.

—¿𝖯𝗈𝗋𝗊𝗎𝖾 𝖽𝗂𝖼𝖾𝗌 𝖾𝗌𝗈?—Lo miro muy sorprendido.

—Yo, pude evitar lo sucedido, pero sin embargo no fue así—Apretó los dientes.

—𝖭𝗈 𝗍𝖾𝗇𝗀𝗈 𝗁𝗂𝗃𝗈𝗌, 𝗍𝖺𝗅 𝗏𝖾𝗓, 𝗇𝗈 𝗍𝖾 𝗌𝗂𝗋𝗏𝖺 𝗆𝗎𝖼𝗁𝗈 𝗅𝗈 𝗊𝗎𝖾 𝖽𝗂𝗀𝖺 𝗉𝖾𝗋𝗈... ¿𝖫𝗎𝖼𝗁𝖺𝗌𝗍𝖾 𝗉𝗈𝗋 𝖾𝗅 𝗇𝗈? 𝖸 𝖺𝗎𝗇𝗊𝗎𝖾.. 𝖸𝗈 𝗍𝖺𝗆𝗉𝗈𝖼𝗈 𝗆𝖾 𝗅𝖺 𝖼𝗋𝖾𝗈 𝖺 𝗅𝖺 𝗏𝖾𝗓 𝗉𝗂𝖾𝗇𝗌𝗈 𝗊𝗎𝖾 𝖾𝗅 𝗁𝗎𝖻𝗂𝖾𝗋𝖺 𝗌𝗎𝖿𝗋𝗂𝖽𝗈 𝗆𝖺́𝗌 𝗉𝗈𝗋 𝗅𝖺 𝖾𝗇𝖿𝖾𝗋𝗆𝖾𝖽𝖺𝖽... 𝖯𝖾𝗋𝗈 𝗌𝗂 𝗇𝖾𝖼𝖾𝗌𝗂𝗍𝖺𝗌 𝖽𝖾𝗌𝖺𝗁𝗈𝗀𝖺𝗋𝗍𝖾 𝗉𝗎𝖾𝗌 𝗍𝗈𝖽𝗈𝗌 𝖾𝗌𝗍𝖺𝗆𝗈𝗌 𝖼𝗈𝗇𝗍𝗂𝗀𝗈...—Nikolai intento darle su mejor sonrisa.