Déjame Amarte © [UME #2]

Capítulo 18

[Megan en multimedia, Miranda Kerr]

Sawyer intenta recuperar la consciencia con la cabeza apoyada en mi regazo mientras le curo las heridas y regaño a Collin.

—Lo siento, de verdad, pero ¿qué quieres que piense del tío que no para de intentar besar a mi novia?

—Ya lo sé, Collin, pero ¿era necesario estamparle la cara contra la pared? —Suspiro bajando la mirada hasta Sawyer y le vuelvo a echar el flequillo hacia atrás—. No deberías haberle dado esos puñetazos.

—Parece un tipo más duro. ¿Cuánto mide? ¿Uno ochenta?

—Collin, Sawyer es un tipo duro lo que pasa es que...

—Nena, que te estoy oyendo —murmura Sawyer.

Agaché la cabeza para que mi cabello creara una cortinilla que me tapara el rostro y sonreí. Él también esbozó una sonrisa.

—No le llames nena —le dice Collin—. Parece que te gusta que te zurren.

—Cuando esté bien repítemelo, a ver si tienes cojones —gruñe Saw.

—Si no paráis os echaré a los dos de mi apartamento —les advierto mientras cojo otro algodón—. Soy dos niños pequeños.

Le quito los algodones que le he metido en los orificios de la nariz para cortar la hemorragia, y él la mueve de forma graciosa.

—¿Todavía no puedes estar sentado, necesitas tener la cabeza en las piernas de Megan? —pregunta Collin con el ceño fruncido.

—Estoy muy débil —dramatiza Sawyer.

Pongo los ojos en blanco. Este chico... Me siento incómoda con Collin y resulta que no debería, porque es mi novio. En cambio ahora preferiría que no estuviera en estos momentos con nosotros. Pero en el fondo le agradezco que no me deje sola con Sawyer y esta electricidad que hay entre nosotros.

—Nena, ¿estás bien? —me pregunta Collin en voz baja posando una mano en mi hombro. ¿Cuándo se ha levantado?

—Sí.

Me sonríe tiernamente y se inclina para darme un beso en los labios. Agacho la cabeza en cuanto nuestros labios se separan sigo curándole las heridas a Sawyer, aunque ya no le sangran.

—¿Puedo quedarme contigo esta noche? Podríamos ver una película.

Miro a Collin y sonrío nerviosa.

—Pues... no sé. Luego lo hablamos, ¿vale? ¿Puedes traerme un vaso de agua?

Asiente y sale rápidamente del salón.

—Como esta noche duerma contigo me planto en la puerta —susurra Sawyer con el ceo fruncido.

—¡Chis! Sawyer, es mi novio. Si quiero dormir con él...

—No quieres dormir con él —resopla con desdén.

—¡¿Y tú qué sabrás?! —susurro molesta.

Cuando va a replicarme entra Collin en el salón y le tiro del pelo para que no diga nada. Tengo muy comprobado que cada vez que abre la boca trae problemas.

—Toma, amor —dice entregándome el vaso de agua.

—Gracias.

Le doy un pequeño sorbo al agua y dejo el vaso en la mesa. Sawyer se incorpora haciendo una mueca de dolor. Debe de dolerle la cabeza. Tiene la nariz destrizada, pero no rota. Collin se ha ensañado bastante. Dejo los algodones junto al resto y suspiro, incómoda por estar inmersa en este silencio. Los dos me están mirando como si esperaran que dijera algo mientras yo me miro las manos.