Capítulo 32

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Mónica

Espera un momento, ¿Estaba viva o aún no había muerto? Me quede shock, todo fue tan momentáneo que me sorprendió no sentir dolor, miré mi cuerpo aun de pie y no había rastro de que una bala hubiera perforado mi cuerpo. Entonces...

Melissa cayó desplomada a mi lado, un disparo había atravesado su cuerpo. Ver la sangre brotar, me había dejado petrificada, parecía que habían pasado minutos cuando, sin embargo, pocos segundos fue el tiempo en el que una bala atravesó a Melissa y ella de un movimiento rápido lanzo otro tiro en dirección a Marcos. Aún conmigo retenida para luego desplomarse a mi lado mientras se desataba una tormenta sobre nosotros. Me recuperé del shock y corrí hacía Marcos que se retorcía en el piso incomodo.

-¿Estas bien? ¿La bala te dio?- le digo cogiéndolo entre mis brazos

-Solo me rozo en el brazo, estoy bien no te preocupes- puso una mueca

Entonces sentí la policía entrar, un francotirador disparó hacía Melissa antes que pudiera matarme. Una corriente eléctrica recorrió mi columna vertebral. Los policías pidieron que subieran los paramédicos. Mis nervios estaban descontrolados. Marcos estaba perdiendo mucha sangre. Entonces me quite el abrigo. Me importaba una mierda el frío o la lluvia, él estaba en esta situación por mi culpa y no permitiría que nada malo le pasará. Era lo mejor que tenía en mi maldita vida. Y con el abrigo hice un torniquete alrededor de su brazo ensangrentado. Cogí su cara entre mis manos, sus ojos se cerraban de dolor.

-Todo va estar bien, amor. No pasa nada, no pasa nada - le digo

Espera ¿Qué?

-¿Amor?- dice sonriendo y yo me sonrojo

Coqueto hasta muriéndose

-No te vayas a morir o no sé qué haría con mi patética vida sin ti

-No podría morirme ahora justo cuando está llegando lo que llevo años soñando

Jajajajajajjaja

Entonces llegan los paramédicos y lo suben en la camilla. Corro detrás de ellos y me montó en la ambulancia.

Al llegar al hospital una opresión se formó en mi pecho cuando me separaron de Marcos. Había perdido mucha sangre y estaba acojonada. Me senté una silla e hice de todo para controlar mi ansiedad y mis ganas de llorar. Marcos era mi prioridad ahora no podía ser egoísta con mi salud mental. No sé cuánto tiempo pasó porque mi mente estaba como en un trance por lo ocurrido, cuando llegan Jonathan, Sara, Samuel y Arthur.

-¡Mónica!- dice Jonathan corriendo en mi dirección y cuando me abraza me derrumbo- ¿Paso algo malo? Mónica no me asustes ¿Cómo está mi hermano?

-¡No lo sé!- digo despegándome de él- Perdió mucha sangre. Todo fue horrible. Melissa me intentó matar y creo... que está muerta-entonces vuelvo a llorar desconsoladamente- Como le pase algo malo a Marcos no me lo voy a perdonar nunca ¡Él no debió haber ido joder!- después de esto empiezo a quitarme las lágrimas a manotazos

-Mónica, él quiso ir- dice Jonathan- A parte tu verás que no le va pasar nada, él es fuerte.

-Exacto, aparte podría a ver sido peor si él no estuviera allí para ayudarte ¿No es cierto?- menciona Sara y cuando lo hace siento una lágrima correr por mí mejilla frenética, me pasa un abrazo por encima de los hombros y me apretuja contra ella.

Pasamos un rato más en silencio. Logro controlar mis ganas de llorar y Jonathan avisa a sus padres de lo ocurrido. Entonces un médico se acerca a nosotros.

-¿Familiares de Marcos Edwards?- pregunta

-Yo soy su hermano- le responde Jhoni

-El paciente perdió mucha sangre, pero ya está fuera de peligro. La bala a pesar de no perforar su cuerpo rozo una zona sensible de su brazo, tiene un tipo de sangre común por lo que no pasamos trabajo a la hora de la transferencia. Fue una excelente idea hacer aquel torniquete con un abrigo

Alma DesorientadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora