¹ 𝐑𝐔𝐋𝐄𝐒 - 𝐓𝐨𝐛𝐢𝐚𝐬 𝐄𝐚𝐭𝐨𝐧/𝐅𝐨𝐮𝐫

-19. Satisfaction

La noche parecía eterna, las luces, las risas, la música. La noche era preciosa y jóven.

Y por primera vez en un largo rato me permito disfrutar de todo lo que me rodeaba.

Oficialmente era un osado. Había pasado exitosamente la iniciación.

Durante casi 3 años de mi vida había luchado para conseguir estar saboreando está satisfacción. Y ahora que la había alcanzado... Mi pecho respiraba tranquilo y mi mente se sentía en orden.

Fui la mejor de mi promoción. El primer lugar.

Desde que mostraron los resultados todo paso como un borrón, muchas abrazos, felicitaciones... Se convirtieron en bailes libres bajo la vibrante musica en la plazoleta principal del pozo. El ambiente era caluroso y movido bajo las luces neón. ¿Pero a quien carajos le importaba? osadía estaba de fiesta.

Nuevos miembros oficiales eran bienvenidos al corazón de la facción.

Había perdido de vista a los chicos, solo se que Jace estaba por ahí coqueteando con alguna chica, después de qué las cosas no funcionaran con Clarisa y que está simplemente lo dejara como un trapo viejo, mi pobre hermanito había estado apagado y con el corazón roto.

Razón por la cual casi nadie lo veía y su presencia pasaba desaparecida. Se refugiaba en algún rincón de osadía o en el apartamento de su hermano mientras sufria la perdida y la dejaba ir.

Supongo que el haber obtenido semejante calificación final fue el último escalón para sacarlo de su burbuja de tristeza y despecho. Y ahora estaba gozando la noche, ¿Que mejor entrada a la soltería?

Solo diría que cuando Willow se enteró, estuvo a punto de hacer un viaje a cordialidad y prenderle el cabello naranja en fuego por haber herido a su hermanito adoptivo por elección. Nos llevó a Jace a Eric y más de media hora para detenerla y calmarla.

Edward y Mayra estaban por ahí en su burbuja de amor, aunque últimamente había notado un comportamiento algo raro en la chica. Ed también, por lo que habíamos decidido mantener un ojo abierto por si las moscas.

Y Willow estaba por algún lugar con Eric haciendo Dios sabrá qué.

Y eso me dejaba a mí, en la barra a la espera de mi cerveza. Estaba feliz, tranquila y en paz. Todo salió bien.

—¿Que hace la niña prodigio de osadía sola, en su noche de debut? — una voz me interrumpió de mis pensamientos de éxito, al voltear veo a un hombre bastante guapo, castaño en sus 20's. En su mano tenía lo que parecía ser Whiskey, estaba en el taburete de al lado, con su cabeza dirigida a mi dirección.

—Me tomo un pequeño tiempo para mí y retomo fuerzas para seguir la fiesta —le respondo tomando de mi botella una vez que el bartender me la da. —¿Que hay de ti?

—Vine a ver el ambiente, típico de Osadía lanzar sus fiestas para las bienvenidas de los nuevos. —me explica encogiéndose de hombros y dándole un trago a su vaso. Veo como la manzana de Adán se mueve conforme traga el líquido ambarino y soy atrapada en ese movimiento. —No pensé encontrar ciertas vistas tan... Solas y apartadas y más cuando se supone que es su noche.

—¿Que puedo decir? En ocasiones uno se pone en ciertos puntos para poder ser vistos... —comento viendolo nuevamente. —Por lo que veo ha funcionado, atraje tu atención.

Muevo mi cabello hacia atrás mientras me acomodaba en dirección de aquel hombre y cruzaba las piernas. Este alzo las cejas reparandome de pies a cabeza con mirada apreciativa, tomo otro sorbo de su bebida y el solo movimiento me tenía absorta.

—Te doy puntos por eso. —me concede poniendo un pie a cada lado del mío, como que hace calor, ¿no? —Aunque no solo llamo mi atención y hay muchos más esperando y mirando.