Teacher's pet || Jenna Ortega x Fem.

Capítulo 3 - Doubts.

Morgan caminaba por los pasillos de la preparatoria, revisando mentalmente la lista de cosas que tenía que hacer. Al pasar por la cafetería, vio a Jenna sentada con su amiga. Aunque solo fue por un instante, notó algo en la postura de Jenna, una tensión sutil.

Decidió no detenerse demasiado en ello y continuó su camino, pero justo antes de salir de la cafetería, sus ojos se encontraron con los de Jenna. Le dedicó una pequeña sonrisa y siguió adelante. Sin embargo, el breve encuentro la dejó pensativa.

Al llegar a su oficina, dejó los papeles sobre el escritorio y se dejó caer en la silla, frotándose las sienes. "No pienses en ello", se dijo a sí misma. Pero la mirada de Jenna seguía en su mente, como una sombra persistente.

Mientras organizaba sus cosas, su teléfono sonó. Vio el nombre de su padre en la pantalla y respondió con una sonrisa.

— ¡Papá! — dijo Morgan, relajándose al instante. — ¿Cómo estás?

— Hola, Morgan. Estoy bien, ¿y tú? ¿Cómo va todo en la escuela? — la voz cálida de su padre resonó en la pequeña oficina.

Morgan suspiró, dejando que la familiaridad de la conversación la calmara.

— Va bien, solo es... diferente a lo que esperaba. Es un nuevo entorno, nuevos desafíos, pero estoy manejándolo. —

— Sabía que lo harías. Siempre has sabido adaptarte. —respondió su padre con orgullo.

— Gracias, papá. A veces es un poco abrumador, pero nada que no pueda manejar. —

— ¿Y cómo está Emilia? — preguntó su padre, cambiando el tema a su nieta favorita.

Morgan sonrió al pensar en su hija.

— Está bien, creciendo rápido. Pregunta por ti todo el tiempo. Deberíamos planear una visita pronto. —

— Me encantaría verla. Dile que la veré pronto, ¿de acuerdo? —

— Lo haré. — respondió Morgan, sintiéndose un poco más tranquila.

Después de colgar, Morgan se quedó en silencio un momento, disfrutando de la calma que la conversación le había traído. Pero entonces su mirada se deslizó de nuevo hacia la pila de papeles en su escritorio, y entre ellos, vio el nombre de Jenna.

Morgan sacudió la cabeza, como si intentara despejarse.

— Es solo una estudiante, Morgan. — se dijo en voz baja. — Solo una estudiante.

Tomó el primer ensayo de la pila y empezó a corregir, forzándose a concentrarse. Pero en el fondo de su mente, la sensación persistía. Algo en Jenna Ortega la hacía sentir inquieta, y no podía entender por qué.

El sonido de la puerta abriéndose la sacó de sus pensamientos. Era la secretaria de la escuela, con más documentos para firmar.

— Profesora Evans....... aquí están los formularios que pidió. —

— Gracias, los revisaré en un momento. — respondió Morgan, tomando los papeles.

Mientras la secretaria se iba, Morgan volvió a sumergirse en su trabajo, decidida a mantener su enfoque. Pero por más que lo intentara, no podía sacarse de la cabeza la sensación de que había algo más en esa breve interacción con Jenna. Algo que la inquietaba, aunque no sabía exactamente qué era.

Morgan seguía inmersa en sus pensamientos cuando escuchó una voz familiar que la sacó de su ensimismamiento.

— ¿Profesora Evans? — Sophie, una de las estudiantes más habladoras de su clase, estaba de pie frente a su escritorio.