pijamada de estrategias-8

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Tuli salió corriendo hacia la habitación de Angie, saltó sobre su cama y anunció emocionada:
-¡Hoy pijamada!

Angie la miró con una mezcla de cansancio y sorpresa, pero solo pudo suspirar.
-Ash, ok -respondió.

-¡Nada de "ash"! Mañana vamos a una fiesta.

Tuli había escuchado por accidente a Carre hablando sobre la fiesta, sabía el lugar y la hora exacta. Aunque al principio había rechazado la invitación, ahora tenía un motivo para asistir.

-Dale, boluda -aceptó Angie, con más resignación que entusiasmo.

Las dos se dirigieron a la habitación de Tuli, quien puso una película de terror, sabiendo que eso haría que Angie la abrazara buscando consuelo. Mientras tanto, un plan se formaba en su mente.

**POV Carre**

"Lo intentaré de nuevo," pensé, subiendo hacia la habitación de Angie. Toqué la puerta, pero al no obtener respuesta, entré. En la cama, un bulto bajo las sábanas me hizo sonreír; asumí que era Angie. Con suavidad, le pasé un brazo por la cintura, solo para darme cuenta de que algo no estaba bien. La suavidad del "cuerpo" era inusual, así que destapé las sábanas para descubrir un gran oso de peluche.

"Qué raro," pensé, sintiendo una leve irritación. "Iré a ver si está en la habitación de Tuli," me dije, mientras me dirigía allí.

Al entrar, las vi a ambas, Tuli y Angie, abrazadas y profundamente dormidas. Sentí una frustración creciente. "De nuevo cagándome el plan," murmuré para mis adentros. Cerré la puerta con un golpe, lo suficientemente fuerte como para liberar algo de mi rabia.

Tuli abrió los ojos al escuchar el ruido, asegurándose de que Carre se había ido. Una sonrisa se dibujó en su rostro al darse cuenta de que su plan había funcionado. Tomó su celular, sacó una foto con Angie aún dormida a su lado y luego abrió la aplicación de Shein. Tras buscar un rato, se decidió por un vestido celeste para ella y uno negro para Angie.

Sabía que convencer a Angie no sería fácil, pero la idea de hacer match con su mejor amiga la entusiasmaba

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Sabía que convencer a Angie no sería fácil, pero la idea de hacer match con su mejor amiga la entusiasmaba. Realizó el pedido para que llegaran al día siguiente por la tarde y, satisfecha, se dejó llevar por el sueño.

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Hola, lo siento por desaparecer estaba ocupada, y también lo siento por lo corto que esté Capitulo.

Latidos desiguales (carre angie)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora