47

1.6K 147 48
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.





47. EL INICIO OFICIAL.









Este beso tiene un sabor y un significado diferente a los otros besos que le he dado, a pesar que no un beso como tal sino un beso donde debo parar y besar repetidamente sus labios sin poder parar de esbozar una sonrisa sobre sus labios. Las esquinas de sus ojos forman pliegues que significa que él está sonriendo incluso con los ojos y muy pocas veces sentí lo que estaba sintiendo en el estómago cuando afirmó que si.

-—Si, claro que sí. —respondí efusivamente para mirarlo enternecida.

Tome su mentón y mejilla con mis manos viendo esa sonrisa de chiquillo que se veía en su rostro, de niño, que me hace no creer por unos momentos cuando él simplemente me ve con esa sonrisa sin más.

—¿Me lo estas pidiendo..? Para. —freno mi emoción por unos instantes para confirmar si es que no fue producto de mi imaginación—. ¿Me estás hablando en serio?

Por lo tanto en respuesta el primero asiente con su cabeza mostrándome una sonrisa amplia para él tomar el lugar de sus manos y poniéndolas sobre mis mejillas.

—Si, claro que te hablo en serio.

Vuelvo a sonreir confirmando que no pensé que una simple pregunta que quería que me la haga y a la vez no estaba tan desesperada porque lo diga me hace pensar que estaba equivocada. Mi emoción me contradice, realmente quería esto.

Lo beso, uno, dos, tres besos casi ruidosos sobre su rostro colorado y acalorado también para asentir varias veces.

—Si, si quiero Facu.

Suelto sin evitar mi voz derretida por el y dejo escapar un peso que cargaba siendo sincera

—Pensé que no lo ibas a decir nunca.

—¿Qué? —reacciona riéndose por mi idea acunando aún más mi rostro en sus manos—. ¿Por qué? Yo quería decirlo, pero dudé un montón. Y no sé, tenía miedo de que no estuvieras en la misma sintonía.

Mi cara probablemente sea de la mujer más feliz, en este momento, que está pisando esta cancha y no puedo evitar pensar si el que me estuviera pidiendo que sea su novia esté relacionado con que el equipo salió campeón. Da igual, no importa realmente eso, solo ver a Facundo pidiéndome porque quiere, noto eso en su cara.

—Te quiero, Ame. —dice sobre mi nariz.

Suspiro cerrando mis ojos al sentir que suelta mis mejillas para rodear mi cintura y unir sus manos en mi espalda solo para alzarme por unos segundos que son eternos. Confirmamos en ese beso por medio de una sonrisa que se cola que más o menos vamos en serio, ahora sí, ¿no? Emoción.

Al volver apoyar mis pies en el césped se corta un poco la burbuja boluda a la que me subí para percibir todo lo que sucedía a nuestro alrededor, Facundo me vuelve a tomar de la cara para dejarme un beso sobre los labios para dejar de prestar atención cuando escucha, siente, que lo llaman. Ambos miramos a la dirección y lo que sucedía era que había jugadores llamando para la foto grupal con la copa, así que él se disculpa conmigo, como si fuera necesario y se va con los demás jugadores.

Frenesí | Facundo ColidioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora