The Handmaiden.

18

Asi como se le había prometido, después de días él salía del hospital para ir al parque, caminaba débilmente dejando ver la diferencia entre él y los demás niños, aquellos que estaban con las mejillas regordetas, con sus ojos llenos de vida mientras su hermano era delgado,débil y sin un brillo resaltante.

Más todo cambio cuando por primera vez jugó como cualquier otro niño de su edad, se agotó físicamente disfrutando de ese momento hasta que su cuerpo no pudo más, cansado se sentó a lado de su hermana pero nunca dejo de sonreír.

—¿Te gustó?

—Si...¿podemos venir seguido?

—Claro...

—Y bien...¿Que sigue?¿A qué otro lugar quieres ir amigo?

Jungkook se acercaba con una botella de agua misma que abrió para darse la al niño.

—Quiero ir a casa...estoy muy cansado.

—¿Quieres subirte a mis hombros?

Él asintió mientras lo veía.

Al llegar al apartamento Jungkook dejo Jaehyun en su cama pues él a mitad de camino había cedido ante el sueño.

Hana solo se acercó acariciando su rostro mientras se recostaba a su lado.

—¿Estás bien?

—Estoy preocupada...lo ví muy cansado.

—Es normal, no jugaba mucho en el hospital.

—No...es diferente...no sé cómo explicarlo.

—Ven... déjalo dormir, vamos a preparar algo de comer y lo despertamos.

Ella acepto, caminaron hacia la cocina y se tomaron su tiempo para preparar varios platillos para que Jaehyun probará cualquier cosa que le llamara la atención, al tener la mesa puesta Hana camino hasta la habitación, se acercó a su hermano y su peor pesadilla inicio.

Su rostro estaba frío, su pecho no movía.

—J-jaehyun...¿Jaehyun?...

Lo movió tratando de despertar lo.

—N-no por favor no....¡Jaehyun!

Su grito alertó a Jungkook quien en segundos estaba ahí, aquella escena donde Hana abrazaba a su hermano mientras trataba de despertar lo fue un golpe duro.

—¡DESPIERTA POR FAVOR!¡JAEHYUN!...No puedes dejarme...no me abandones por favor, seré una mejor hermana, iremos a todos los lugares que quieras... lucharé por tu custodia pero por favor no me dejes...

Ella lloraba mientras se mecia abrazando a su hermano. Jungkook con un nudo en su garganta se acercó solo para rodearla entre sus brazos.

—J-jungkook... m-mi hermano...

—Tranquila...

Su voz apenas salía, él también estaba llorando, quería evitarlo pues debía ser fuerte pero al final ese niño se había ganado su corazón, lo había aceptado incluso sin conocerlo y eso era tan especial para él que ahora no tenerlo se sentía tan desgarrador.

—Hana...debemos...

—No por favor no... él sigue vivo...

—Hana...

Ella volteó dejando ver su dolor, sus ojos llenos de lágrimas,mismas que caían a mares por sus mejillas, su rostro pálido y sus labios temblorosos.

—Debemos hacerlo...yo me encargaré de todo.

—Es solo un niño...

—Lo se...lo se bien.

Jungkook se levantó alejando se solo para poder soltar sus lágrimas sin que ella lo viera, tomo su teléfono y marco al doctor que lo estaba atendiendo y después continúo con los preparativos para despedirlo.

Cuando la noche cayó, solo podía ver a Hana permanecer en la sala de familiares, solo estaba ella, su demás familia no asistió, no les importaba en absoluto, lo había dejado claro.

Solo pocas personas y la mayoría fueron padres e hijos que lo conocieron en el hospital. Todos los lamentaban .

Jungkook podía verla llorar, quería ir y abrazarla pero sabía que necesitaba desahogarse sola, debía sacar todo el dolor para poder despedirse como correspondía.

—¿Eres su novio?

Una mujer le pregunto —Si...

—Deberias de intentar que coma algo...estás cosas son muy agotadoras. Llévale una sopa o algo caliente.

Él acepto pues ni recordaba aquello.

—Y también come algo tu...ambos se ven mal.

—Lo haré gracias...