Capítulo 57

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Nueva York 2 meses después...

Luca

Matteo esta sentado en el suelo de mi despacho, aventando los legos que su tío Sergei le había traído, Elena le había vestido con un overol celeste y una camisa blanca. Los hombres de la triada y yo estábamos en una reunión todos, menos Sergei que se había ido a molestar a Elena en sus clases de yoga.

- ¿Enserio le conseguiste el tanque? – pregunta Adam.

- Claro que si, no hay nada que no pueda conseguir – Zamir se había vuelto muy cercano con los demás, Dom nos visitaba de vez en cuando y es que Aurora estaba embarazada de su primer hijo.

- Lo hombres de la mafia son muy... extravagantes – Terry se había vuelto en  un socio comercial muy importante; él y su esposa estaban esperando trillizos, tenia 3 meses de embarazo, el hombre se cree la gran mierda por poner tres niños allí...

- No lo puedo creer, ¿sabes lo que me va a costar mantener a raya a Sergei? – pregunto y empezamos todos una discusión, la puerta se abre de golpe y entra Jelena y pone la tv conectado las cámaras de la casa, específicamente en el gimnasio; donde Elena esta sentada en una pelota haciendo sus ejercicios de yoga y a Sergei que casualmente estaba a la par de mi esposa, sentado en una pelota inflable haciendo lo mismo que Elena ¿Qué mierdas?...

- Di que si calabaza... anda no seas mala – le ruega.

- No, por que tú eres un mal perdedor – Elena empieza a dar pequeños saltos con los brazos estirados controlando su respiración.

- Te lo prometo, además  Agatha esta acá, ella puede ser de arbitro, mira que hiciste que haga estos estúpidos ejercicios.

- Cállate, además te servirán en algún futuro – Elena se mueve adelante y atrás acunando su vientre – bien, pero solo una vez y si pierdes no te quejes  - se detiene - Agatha.

- Si señora.

- Prepárate eres el árbitro – Elena se pone de pie, en un top deportivo y short lila, mi esposa se mira hermosa.

- Toma – Sergei le da un control y se ponen en frente del espejo con la tv encendida.

- ¿No me jodas? enserio acaba de retarla a un baile ¿qué le pasa a ese sujeto? – pregunta Zamir, Adam y Christopher, salieron de la habitación diciendo que lo grabarían todo.

- No me lo preguntes... - Elena había comprado una consola de juego para George para cada ves que nos visitaba y había un juego que se llama Just Dance, Sergei había quedado tan fascinado que compro uno y cada vez que puede reta a mi esposa a un baile, donde normalmente pierde... por ser tieso como un muerto.

En la pantalla suena Stayin' Alive de los Bee Gees, vemos como en los siguientes 6 minutos mi esposa le gana a Sergei con una puntación excelente.

- ¿Cómo... ¿Cómo puedes ganar? ¡Joder si estas embarazada! – le grita Sergei y Elena solo se ríe.

- Y ¿eso que tiene que ver con que seas un tieso?

- No es justo, de seguro hicisteis trampa – se queja.

- Te lo dije, no eres un buen perdedor – vuelve a tomar asiento en la pelota y toma un trago de agua, antes de tirarle la botella a Sergei – ahora vete a la chingada, que estoy tratando de no estresarme y verte me estresa.

- Un placer calabaza – se despide. Cuando todos estamos en el despacho vemos a Sergei entrar con la cabeza baja. No hace falta que diga nada todos nos reímos de él.

- Son unos idiotas – se acerca a Matteo que chilla feliz al ver a su tío - ¿verdad que son unos idiotas con tu tío favorito?

- Merda – grita mi hijo y eso solo me enfurece, la primera palabra que dijo fue mierda enfrente de mi esposa, Elena  se puso a llorar y después a pelear con Sergei por ser un idiota mientras se reía orgulloso de su logro.

- No digas eso enfrente de tu madre que es muy enojada, y le pega al tío Sergei – dice y me lo entrega,  me da una de sus sonrisas, empieza a tener sus primeros dientes.

- Ba... ba – me dice y me siento tan jodidamente orgulloso, cada vez que me llama así siento un amor infinito por mi hijo,  porque su segunda palabra fue papá.

- ¿Ma...ma? – y la tercera obviamente fue mamá. Elena estaba feliz, pero se sintió decepcionada que no dijera mamá como primera palabra.

- Mamá vendrá pronto hijo – algo que Elena empezó a hacer es tocar el piano de nuevo, le compre un  piano hermoso que tenemos en la sala de estar, donde todas las noches antes de la siesta de Matteo toca algo para él.

Seguimos burlándonos de Sergei hasta que Matteo grita - ¡Mama! – al estar en el suelo empieza a gatear, pero a medio camino intenta ponerse de pie y Elena grita.

-¡Luca! mira – se arrodilla y habla con Matteo – ven con mamá mi amor... eso es... ven aquí... vamos bebé tú puedes – con pasos tambaleantes, Matteo llega a los brazos de su madre que lo levanta y lo llena de besos, las risas de mi mujer y mi hijo son lo mejor del mundo y jamás cambiaria nada de eso.

Me acerco y dejo un beso en la cabeza de Matteo y pongo una mano en el vientre donde mi chica está creciendo - ¿Cómo están las mujeres más bellas de mi vida?

-Bien... - dice con un suspiro – aunque... Luca quiero un brownie con...

- Chocolate, lo se cielo – le digo y en eso siento esos antojos raros que me dan cada ves que ella  menciona sus antojos – también pizza de pepperoni.

- Con mucho queso – termina y me da un beso, antes de salir con Matteo a buscar a los pobres de Dante y Enzo.

- Sergei – lo llamo.

- ¿Uhmm?

- Dile a tu mamá que me mande la jalea de fresas...

- Si ya te la traigo... más bien dicho,   yo la tengo – dice y se encamina a la puerta - ¿Cómo es que tus antojos son las jaleas de mi madre cabron?

Al salir de la reunión encontramos a Elena con el brownie y sorbete de vainilla, a la par tiene la pizza y le ha puesto jalea de fresas... asqueroso.

-Señora recuerde...

- No mucho dulce – repiten las dos al mismo tiempo – lo se, Rita gracias por cuidar de nosotros.

- Ita – Matteo le toma la mano.

- Cualquier cosa por mis chicos – se da la vuelta. Me acerco a mi esposa y le robo el bocado que iba a meterse.

- ¡Luca! – me regaña y tomo asiento a su lado.

- Baba.

- Hola mi príncipe ¿listo para comer? – me da un asentimiento y le doy de comer, de vez en cuando, Elena me da un trozo de pizza.

En la noche Elena esta sentada en mi regazo, acabo de darle dos orgasmos y sigue moviéndose porque aun no me he corrido.

-Te amo Luca – gime y se mueve mas rápido – Te amo, no sabes lo feliz que me haces.

- Yo te amo cielo – gimo y la tomo del cuello – ahora quiero que me montes y te corras cariño... 

THE MAFIA QUEENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora