SCP-610: La Carne que Odia, parte 1.

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Música para acompañar el capítulo 1/2:

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Música para acompañar el capítulo 1/2:

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Ante la oportunidad de dimensionar las verdaderas naturalezas y capacidades así como las estructuraciónes de los Destacamentos Móviles, se llego a creer en que eran una pieza inamovible, una fuerza que si se lo proponía, eran terribles para cualquier anomalía.

Entonces, el Sabato contemplo en ellos la posibilidad de alcanzar la grandeza humana, más allá de ser simples héroes, los espectadores les perseguían ansiosos, anhelando presenciar a estos Destacamentos Móviles en sus misiones, aquellos despligues de fuerza táctica y poderío humano como tecnológico.

Y en pos de ese pensamiento, los ánimos se elevaban en excitación y expectativa por explorar más a fondo los intrincados engranajes que conforman las distintas áreas de la Fundación S.C.P.

En otra zona del Sabato.

—¿Y nadie se pregunta que tan poderoso es un Destacamento si se divide? Ya saben, tres aquí, tres allá, tres incluso por allá... —cuestionó el Che mientras se rascaba la barbilla y se le caía el cigarro, maldiciendo después.

—Deben ser igual de competentes por su propia individualidad que si fuesen todo el mismo grupo, claro, si no tomasemos en cuenta las jerarquías de los Destacamentos —explicó Fidel encojiendose de hombros mientras daba otra calada más a su habano.

—Sinceramente llega a preocupar la estabilidad mental de esos hombres y mujeres, y del conjunto en unión de su misma tecnología y poderío; su formación misma, me refiero. Estar moldeados a situaciones de escenario por los efectos anomalos los deben convertir en anti-anomalias de clase alta —expuso el Che.

—Descabellado... no es —formando dos círculos con el humo, Fidel volvió su mirar al resto del Sabato—, si tomamos en cuenta su juramento como una Fuerza de Trabajo Móvil.

En otra zona del Sabato.

—Estamos seguros... ¿De que son humanos? Jesucristo, suenan hasta como un Terminator pero con más variedad de funciones y más flexibles —protesto una agente de policía federal con una mirada desdeñosa.

—Si y si, y un doble si empujado de otro si para todas tus respuestas —acompaño otro agente de policía mientras se masajeaba su hombro—, con las anomalías teniendo digamos, una "ventaja terrenal", deben tener planes de planes o en este caso, una espada igual de filosa para chocar contra lo anomalo.

—¡Parecían ni tener una maldita alma! Es "producto" de vivir con lo anómalo... te vuelves un anómalo sin sus habilidades pero de carácter y funcionalidad... de eso como anillo al dedo papi —gesticulo la agente con un vacío en su corazón, sintiendose terriblemente identificada con algunos DM.

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