—[... Eso. ¿Núcleo?]
Murmuró el gigantesco gólem.
—[Pequeño. Núcleo.]
—[Núcleo. De gólem.]
Unos gólems alrededor comenzaron a murmurar.
—Sí, es un núcleo. He venido a devolverlo —respondí sin perder tiempo.
—[Núcleo. Devolverás. ¿A nosotros?]
El núcleo del gólem se convirtió en una pieza esencial para los magos desde su gran descubrimiento inicial. Es porque solo tenerlo ayudaba a incrementar el poder mágico y también se podía procesar en todo tipo de herramientas mágicas.
Por supuesto, Charlotte también tenía un núcleo de gólem.
Después de buscar en su subespacio, la mayor parte de los núcleos fueron procesados para crear herramientas mágicas, y solo quedaba uno pequeño en su forma completa.
Qué suerte fue tener al menos esto.
—Miren.
Aproveché el momento en que los gólems detuvieron su ataque para infundir magia en el pequeño núcleo. Una cálida luz se extendió sobre la esfera amarilla del tamaño de un puño, y una fina cortina de energía se formó sobre ella.
Cuando la bajé lentamente al suelo, las piedras que yacían sobre el pantano comenzaron a agruparse y formar una pequeña figura.
*¡Clac! ¡Clac!*
—[¡Kyu!]
Un pequeño gólem abrió los ojos.
—[¿Bebé? ¿Gólem?]
—[Pequeño. Gólem.]
—[Volvió. A la vida.]
—He regenerado el núcleo.
—[¡Kyu! ¡Kyu!]
El pequeño gólem comenzó a mover sus brazos y piernas, saltando de un lago a otro. Debido a que solo medía alrededor de medio metro, parecía una mota de polvo junto al gigantesco gólem.
—[Bebé. Gólem.]
—[¡Kyu!]
Todos los gólems se inclinaron y miraron al pequeño gólem.
Suspiré al ver que su hostilidad disminuyó.
—Entonces, ¿ahora están dispuestos a negociar conmigo?
—[Humana. Salvó. Bebé.]
—[Mago. El primero.]
—[Escucharemos. Historia.]
—[Negociar.]
Qué alivio.
Finalmente parecía que la comunicación estaba funcionando.
«Antes fue realmente aterrador.»
Pensé que en verdad sería aplastada.
*¡UREUREUNG!*
El gigantesco gólem se desintegró con un temblor. Yo también descendí suavemente del aire y me posé sobre el suelo.
—¿No les resulta incómodo este hábitat? No llega mucha luz solar y es tan húmedo que el musgo crece en sus cuerpos.
—[Húmedo. Musgo. No sé. Puede. Evitar.]
—[Aquí. Humanos. No entran.]
—[No. Atacan.]
ESTÁS LEYENDO
Me seduce el ingrato que quiere matarme
Romance-Charlotte, te amo. -... ¿Eh? Al abrir los ojos, me di cuenta de que había poseído a la temida villana de la novela que escribí, y esto justo después de haber lavado el cerebro al protagonista masculino. ¡Qué locura! No quiero besar al protagonista...
