Pinceladas del Destino 🎨 [𝗸𝗼𝗼𝗸𝗺𝗶𝗻; 𝗼𝗺𝗲𝗴𝗮𝘃𝗲𝗿𝘀𝗲]

✦ - Here Comes the Sun 🎨

Capítulo 28.

Al día siguiente, Jimin despertó de golpe con el sonido insistente de su teléfono. La habitación estaba envuelta en la penumbra de la mañana, y el omega se frotó los ojos mientras intentaba despejarse. Al mirar la pantalla, vio que la llamada era de Taehyung. Aunque solían intercambiar mensajes a menudo, rara vez hablaban por teléfono, especialmente a una hora tan temprana. La sorpresa hizo que su corazón se acelerara de inmediato.

Con un profundo suspiro, Jimin contestó la llamada, su voz todavía arrastrando los vestigios del sueño.

—¿Hola? ¿Taehyung? —preguntó con tono preocupado. Era inusual que su amigo lo llamara a esa hora, y aún más desconcertante el sollozo que llegaba desde el otro lado de la línea.

El silencio que siguió al saludo fue pesado, y Jimin sintió cómo el ambiente en la habitación cambiaba. Su aroma a fresas, normalmente suave y reconfortante, se mezcló con una nota amarga de chocolate, reflejo de la preocupación que empezaba a consumirlo. La tensión era palpable, como si el aire se hubiera vuelto más denso.

—Minnie... —la voz de Taehyung era un susurro roto, cargado de dolor—. Necesito hablar contigo.

El omega de aroma a fresas se incorporó rápidamente en la cama, sus pensamientos se agolpaban en su mente. La voz quebrada del alfa al otro lado de la línea y el temblor en sus palabras lo llenaban de inquietud. Se pasó una mano por el rostro, intentando sacudirse la somnolencia y la confusión.

—¿Qué pasa, TaeTae? —preguntó, intentando mantener la calma aunque su corazón latía con fuerza—. ¿Por qué estás llorando? ¿Qué ha pasado?

El silencio se estiró, interminable. Jimin pudo imaginar a Taehyung al otro lado de la línea, luchando por contener el llanto, y la preocupación en su pecho se intensificó. Sentía un peso en el estómago mientras esperaba una respuesta.

—Lo siento si te desperté, Minnie. Puedo llamar más tarde si...

—No, no te preocupes por eso —interrumpió el omega, su lobo interior estaba preocupado al igual que él pero se controló, tratando de mantener la voz firme—. Estoy aquí para ti. ¿Qué ha pasado?

El sonido de los sollozos se hizo más fuerte, y Jimin tuvo que contener la respiración para no dejarse arrastrar por la ansiedad. Los sollozos de Taehyung eran desoladores, llenos de una tristeza palpable que atravesaba la distancia entre ellos.

—E-es Hoseok —dijo Taehyung finalmente, su voz rota por el dolor.

La preocupación de Jimin se convirtió en miedo. Su mente se aceleró, tratando de entender la gravedad de la situación.

—¿Hoseok? ¿Está bien? —preguntó Jimin, el temor en su voz evidente.

El silencio se rompió con un fuerte llanto de Taehyung, haciendo que el corazón de Jimin se hundiera aún más. La angustia del alfa era palpable, y el omega se sentía cada vez más ansioso.

—Hoseok... Minnie, él me ha dejado —dijo el alfa entre sollozos, cada palabra cargada de una tristeza abrumadora.

La revelación cayó como un golpe brutal. El omega rubio quedó en silencio, su mente un torbellino de confusión y shock. No podía comprender cómo Taehyung y Hoseok, que parecían tan inseparables y enamorados, podían estar atravesando una ruptura. El quiebre. La magnitud del dolor de su amigo parecía enorme, y el omega se sentía completamente impotente.

—¿Qué? —preguntó Jimin, su voz apenas un susurro, temblando con la desesperación—. ¿Por qué? ¿Cómo pudo pasar esto?

El alfa sollozó aún más fuerte, y con esfuerzo comenzó a relatar los detalles de la ruptura.