Olivia Benson una mujer de 36 años trabajadora en la unidad de victimas especiales de New York, ella es capitana de la central, tiene una hija llamada Emily, su padre es Elliot Stabler su antiguo compañero de trabajo.
Emily tiene 16 años vive con su...
El día más esperado había llegado Olivia se estaba muriendo de los nervios, estaba en la habitación mientras la arreglaban, mientras Elliot estaba en casa de Amanda y Carisi preparándose para ir a la iglesia.
— Mamá por favor cálmate, sabes que todo saldrá bien, no temas, de hecho deja de estarte moviendo que se esta arruinando el peinado -dijo Emily intentando calmar a su madre, en un intento fallido.
— Y si se arrepiente, y si no llega -dijo Olivia apunto de morderse las uñas, en eso llegó Richard, quien lo acompañaría al altar, ya que Cragen el que pensaba que la llevaría, al final no podrá llegar a tiempo a la ceremonia, pero al convite si ya que aterriza una media hora antes de que ella se casara.
— Bueno y como esta la novia más hermosa de hoy -dijo Richard
— Bueno está nerviosa, no para de delirar que papá la dejará plantada en el altar, cuando hace unos años atrás tuvieron nuestros hermanos, y él decidió pedirle matrimonio a mamá, yo esperó no estar así el día que me case -dijo Emily mirando a su madre que de golpe dejó de estar nerviosa y miró a su hija con cara de querer matar a alguien.
— Tu aún eres una niña que solo tiene que pensar en los estudios y no en casarse, sabes que no me voy a oponer a que te cases, pero te lo prohíbo hasta los 25 años -dijo Olivia sin flaquear por la mirada que le daba su hija.
— Mamaaaaá -dijo indignada su hija —Sabes que me voy a casar cuando tenga un trabajo estable y Félix se anime a pedirme matrimonio.
Emily se fue después de decir eso, estaba un poco triste, sabe que a sus 18 años tiene que centrarse en entrar a las universidades que ella quiere, ya que hacer dos carreras será un poco complicado pero no imposible, pero... volviendo a la boda, todo había quedado precioso después de más de un año organizándolo todo.
La boda no se hará en una iglesia, será en un jardín bastante amplio en donde los niños puedan jugar y no sentirse tan asfixiados.
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El banquete de la boda se haría en el mismo recinto así que lo tenían más fácil.
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Unos meses atrás enviaron las invitaciones de la boda
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