Mi Chico Perfecto | Iván Buhajeruk

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Estaba en clases. El día anterior me quedé dormida todo el día y no hice las tareas para hoy.

En la mañana mi cuello ahora tenia la marca de la mano de mi padre y en mi mejilla me golpeó tan fuerte que tuve que tapar mi mejilla con mucho maquilla al igual que mi cuello.

No estaba baja concentrada en la clase, nisiquiera sabía en que materia estábamos.

Guardé mis cosas en mi mochila y me levanté para salir del aula.

Escuché algunas palabras del profesor pero lo ignoré y salí.

No quería estar en la escuela, menos  quería estar en casa, aún seguía sin conocer bien la ciudad entoces no sabía dónde ir.

Estaba caminando sin rumbo por los pasillos hasta que pensé en ir a un lago que estaba por el campus de la escuela.

Llegué y me senté en unas bancas alrededor del lago.

Todo el días estaba nublado, al parecer hoy lloverá.

Estuve un rato hasta que sintí que alguien me tocó el hombro y me asusté.

Ely- ¡Iván! Me asustaste -dije sin mirarlo-

Sebastián- ¿Iván? -frunció el ceño y se sentó a mi lado-

Pensé que sería Iván porque el acostumbraba a hacer eso.

O más bien porque quería que iván fuera el que estuviera aquí.

Sebastián- Hola, ¿cómo andas? ¿Por qué tan sola?-

Ely- Por nada... sólo quería estar aquí-

Sebastián- Después de esa fiesta ya no hablamos -me miró sonriendo-

Ely- Ni siquiera te importó que me halla ido-

Sebastián- Pero te llamé-

Ely- Claro que no -dije confundida-

Sebastián- ¿Este es tú número?-

Sacó su celular y me mostró mi número-

Ely- Sí- asentí-

Sebastián- Dame tú celular- le di mi celular y buscó su número-

Sebastián- Pues claro, me tienes bloqueado-

Ely- Yo no te bloquee-

Sebastián- Qué raro. Bueno, no importa -puso su brazo sobre mis hombros-

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Narra Iván Buhajeruk

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Tiago- Oye, tu novia anda sola con Sebastián en el lago-

Iván- Ella no es mi novia-

Estábamos en clase. Si ya sé que raro.
Odiaba demasiado la clase de historia.

Tiago- Entoces no te importa que él esté muy cerca de ella -hizo una señal para que mirara a la ventana-

No dije nada y suspiré. Miré a la venta y sí, estaban los dos solos

Mauro- ¿Crees que le diga lo de la apuesta? -preguntó sonriendo-

Profesor- Los estoy echando. Callense y presten atención-

Todos lo Ignoramos.

Iván- ¿Él lo sabe? -lo señalé-

Rodrigo- Cuando lo supo tuvo un relación muy rara -puso su manos en sis bolsillos- la verdad creo que trama algo-