Mi Chico Perfecto | Iván Buhajeruk

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Nuevamente era viernes, pero aún quedaban clases por dar. Había tenido una semana difícil con tantos proyectos, y apenas había hablado con Iván. Desde que hablé con Mateo, evitaba verlo; sabía que si nos encontrábamos, no podría evitar preguntarle sobre la apuesta, y temía que la conversación no terminara bien.

Me dirigía a mi siguiente clase, Ética y Moral, la última antes del receso. Al entrar, suspiré. La clase solía ser aburrida, pero tenía que aguantar.

A mitad de la lección, decidí ir al baño. Me acerqué a la profesora, pedí permiso, y salí del aula. Caminé hacia los baños, pero justo cuando iba a abrir la puerta, frené al escuchar voces conocidas: eran Nicole e Iván.

Iván- No, Nicole, eso no va a pasar -dijo con tono firme-

Nicole- Tenemos que decirle lo de la apuesta, Iván -insistió-

Otra vez esa mención de la apuesta sin saber qué significaba. Me acerqué más a la puerta, tratando de escuchar mejor.

Iván- No le diremos nada -noté el fastidio en su voz- No por ahora-

Nicole- Discutí con Mateo por culpa de tu estúpida apuesta, No puedo ver a Elizabeth a la cara sin pensar que soy una mierda de amiga por ocultarlo -dijo molesta-

Iván- Sé irá todo a la mierda si lo sabe, y no puedo permitirlo -asmitió Iván con voz baja y seria-

Nicole- Si no se lo dices tú, lo diré yo -amenazó- 

De pronto, sentí unas manos en mis hombros, por lo que sobresalté.

Rodrígo- ¡Hola! -rió-

Ely- ¡Callate! -susurré empujándolo suave. Intenté volver a escuchar, pero ya no se escuchaba nada-

Rodrígo- ¿A quién espías? -preguntó confuso-

Al oír pasos acercándose, tomé la mano de Rodrigo y lo arrastré lejos de la puerta. Nos escondimos en un aula vacía antes de que alguien saliera del baño.

Rodrígo- ¿Qué pasa? -miré hacia atrás y vi la puerta abrirse, antes que pudieran salir entré a un aula-

Rodrígo- ¿Qué carajos está pasando, Elizabeth? -se cruzó de brazos-

Lo ignoré momentáneamente y miré por la ventana de la puerta. Vi salir a Nicole e Iván, ambos mirando a su alrededor como si buscaran a alguien. Me aparté para que no me vieran.

Rodrígo subió una ceja y me miró confundio.

Ely- Iván está escondiéndo algo, y estoy muy segura de ello -noté como se tensó, fruncí mi ceño y lo miré con sospecha- ¿Tú qué sabes? -entre cerré mis ojos-

Rodrígo- ¿Yo? No, nada -dijo tratando de sonar seguro-

Me crucé de brazos a ver su claro nerviosismo.

Ely- ¿Rodrígo? -desvió la mirada- ¿Qué me están ocultando todos? -pregunté seria-

Rodrígo- Ya te dije que nada, Elizabeth -sonó más seguro que antes, pero ya no podía creerle-

Ely- Te creeré -mentí-

Rodrígo asintió sin mirarme.

Rodrígo- Nos vemos, Elizabeth -dijo sin más, pasó a mi lado y salió del aula-

Me quedé ahí, cruzada de brazos, contemplando la puerta. Ahora estaba más segura que nunca de que Iván escondía algo sobre esa apuesta, y sus amigos no iban a decirme nada. Excepto... quizá Sebastián, pero el problema era que no estaría en la escuela por unos días. Desde la pelea que tuvo con Iván, lo habían suspendido por una semana. Tendría que esperar para hablar con él.