CESAR PARRA.
He pasado una noche de mierda. ¿Por qué la dejaste ir imbécil? Le pregunto al bastardo de cabello pelinegro y ojos cafés del espejo. ¿Por qué mierda pensé que sería mi sumisa? No le intereso, seguramente está enamorada del estúpido de su amigo y anoche salió corriendo para buscarlo. Siento la bilis en la boca. La idea que Cornelio mierda Vega, disfrute de sus sonrisas, sus besos. No, no, no, ¡No!... me niego aceptar algo así.
- ¡Maldición! - furioso le doy un golpe al idiota del espejo. La dejaste ir, ¡La enviaste en los brazos de otro!
Observo como mi mano empieza sangrar. Me río sin ganas, por estúpido me he lastimado la mano. Me acerco al grifo del lavado y empiezo a limpiar la sangre...
Me he puesto una camiseta negra, pantalón negro. Como mi estado de ánimo, y le he puesto una venda mi mano. Me voy a la cocina, hoy no tengo ánimos de ir a Parra Phoenix Automotriz.
- Buenos días, señor... - Rosa, abre los ojos como platos, mientras observa mi mano - ¿Qué le sucedió, señor Parra? - me pregunta preocupada.
- Un pequeño accidente sin importancia.
- Ya veo - contesta dudosa y sé que no me creyó.
- ¿Tortilla española? - pregunta indecisa.
- Perfecto - mascullo. No me apetece comer nada.
- ¿Cinco minutos? - dice con voz temblorosa. ¿Qué le sucede?
- Bien - me doy la vuelta para ir a mi oficina - Cuando regrese Taylor, que vaya a mi oficina.
- Sí, señor. Señor Parra - me llama.
- ¿Qué sucede, Rosa? - me volteo para verla.
- ¿Está usted bien? - ahora la servidumbre, se da cuenta de mi estado de ánimo.
- Estaré en mi estudio.
Entro a mi estudio, todo está igual. ¿Por qué le propuse ser mi sumisa? ¿Podría haberlo intentado de otra manera? No...no sé hacerlo de otra manera, si no aceptó ser mi sumisa, pues que le den. Joder, no puedo sacarla de mi cabeza, ese beso que le di antes que salga de mi casa, fue todo lo que prometía ser, por un instante me recordó a una época de abundancia. Me siento derrotado, sin ganas de hacer nada, probablemente ya no la veré más, no creo que ella quiera ver nuevamente a un hijo de puta pervertido. Me siento en mi sillón detrás del escritorio. Debería llamar a Jiapsi...o tal vez a Fernanda, esté disponible, ella era una excelente sumisa, pero se enamoró de mí, así que tuve que poner fin a nuestro acuerdo...poco tiempo después se casó y hace poco se divorció, solo duró seis meses casada.
- ¿Señor Parra? - dice mi guardaespaldas entrando a mi oficina.
- Jason, ¿Qué ha sucedido? - mi voz se escucha como me siento...demasiado ansioso.
- La señorita Beltrán, durmió en la consulta del señor Ibarra, ella entró anoche y no volvió a salir - me quedo atónito ¿No fue a buscar a su amigo?
- ¿Estás seguro? - envié a Taylor, para que la siga.
- Sí, señor...la vigilé toda la noche.
- ¿Y su amigo?
- No lo sé...seguramente sigue en el hotel - estaba casi seguro que iría con él...pero no fue así.
- Está bien, Jason. Puedes tomarte el resto del día libre...no voy a necesitar de ti.
- ¿Estás seguro? - pregunto no convencido
- Sí, no saldré hoy.
- Gracias, señor...estaré de regreso en la noche - hago un rápido gesto para despedirme de él y desaparece.
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Ella es para mí.👫🏻🫶🏻♥️
ParanormalUna fiesta de máscaras, que lo cambia todo. Una hermosa mujer, que salva a un extraño de ser asesinado. Un hombre inteligente, y mujeriego. Que no sabe quién quiere deshacerse de él. Una amenaza que lo llevará conocer lo que nunca imaginó, y lo que...