4. La violinista

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Había olvidado lo mucho que me gustaba el rancho del bosque, ya en los límites de la región del valle de Eldin. Ese lugar era precioso, en especial esa pequeña explanada contigua cercada, tapizada en madera, y con varias mesas para los huéspedes; mi favorita era la que estaba al fondo, más alejada del rancho, ya que poseía las mejores vistas. Al lado derecho podía ver el lago Nish y la falda de la montaña, y al lado izquierdo el río Hylia, y más al fondo se elevaba la colina de Gongol.

Apenas había pasado medio día desde que partimos en la mañana desde el rancho de Idilia hasta el rancho del bosque; aunque me había tomado la libertad de dar un pequeño desvío por la antigua ciudadela de Hyrule para no tener que pasar por el fuerte vigía; y en consecuencia, con Prunia. Pude evitar darle una explicación de esto a Nuriah simplemente diciendo que así acortaríamos camino.

Para ese punto, ya habíamos terminado la comida del mediodía, y Nuriah practicaba su arquería junto a Tureli a unos metros de mí, cerca del río Hylia. Mientras tanto, yo me encontraba sentado, tan solo apreciando el ambiente por momentos, y pensando en mi anterior experiencia dentro de los recuerdos de Zelda.

De hecho a veces miraba atento a mi mano, mientras cerraba y abría mi puño. Era extraño volver a tener el control de mi cuerpo; ya que aunque estaba experimentando los recuerdos de Zelda, sentía sus manos como las mías, sin ningún tipo de diferencia apreciable; quizá tan solo la suavidad del tacto.

No encontramos explicación alguna sobre por qué estaba un recuerdo en el suelo, sobre un geóglifo, en un lugar tan aleatorio. Además de que solo yo lo experimenté; ni Nuriah o Tureli fueron afectados por esa esfera de agua, lo cual me indicaba que el recuerdo era para mí. Sea como fuere, eso me ayudó a saber qué había pasado con Zelda una vez nos separamos.

Decidí cerrar los ojos un momento, de nuevo estaba teniendo problemas para dormir y me ardían un poco al pegar los párpados. Pensé en la Zelda que se me presentó en la cama, no me quedaba claro qué tan real fue, o si de verdad solo la aluciné; pero definitivamente estaba siendo atacado por una presencia suya.

De pronto una pequeña musiquita me sacó de mis pensamientos, al abrir los ojos y mirar al frente, me di cuenta de que en la lejanía había una chica hyliana tocando un instrumento musical sobre su hombro, casi pegando su mejilla a él. Era una chica realmente bonita, de cabello púrpura oscuro, corto, collar negro, joven, y una expresión bastante gentil. Llevaba puesto un traje curioso café oscuro, lleno de detalles que me recordaban al uniforme de los empleados del rancho, pero personalizado.

Mantenía sus ojos cerrados al tocar su música; estaba en trance, concentrada. Se trataba de un violín, instrumento que se toca frotando un arco recto sobre sus cuerdas. Me apena no poder saber cómo describir algo tan propio de los oídos, pero los sonidos eran hermosos, transmitían una paz y armonía que me hacían tanta falta desde hace tiempo. Perfectamente podría escuchar esa melodía por horas y horas.

Cuando menos me lo esperé, sus párpados se abrieron y me miró sorprendida con esos grandes ojos color ámbar. Desvié la mirada un poco asustado. No lo había pensado, pero quizá era una falta de respeto mirar de esa forma; se podría llegar a malinterpretar, y no la conocía de nada.

Solo que cuando volví a verla, porque obviamente regresé la mirada, aquella chica me estaba sonriendo y sin ningún ápice de molestia; de hecho se le veía con bastante confianza. Aunque me sentí nervioso cuando de pronto se levantó de su asiento, y vino a paso veloz hasta mí.

Me sorprendí un poco por ese acto, aunque no entendía por qué reaccioné así al verla venir hacia mí. Y cuando estuvo ya frente a mi mesa, me habló con cierta confianza y decisión, poniéndo ambas manos sobre la madera.

—Disculpe, es usted Link, el héroe y filósofo de Hyrule, ¿verdad? —me preguntó la chica enérgicamente.

—Ah, sí... Aunque está mal que lo diga yo. —respondí con una sonrisa nerviosa, y casi tartamudeando.

Recuerdo de un amor [#3] - Link y Apaya - Zelda TOTK +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora