Al final de la tarde, cuando el sol se ponía bajo el horizonte, Jimin decidió tomar un descanso, después de haber terminado de ejecutar un baile incoherente. El omega estaba a punto de desplomarse sobre el asfalto, tragando aire con avidez, pero aún así tuvo que arrastrarse al menos hasta el banco en el que yacía su bolso en un espléndido aislamiento.
El agua que se calentaba bajo el sol no hizo que la existencia de Jimin fuera más fácil y, enojado, arrojó la botella aún llena a la basura. Tenía mucha sed, pero era mejor correr a la tienda más cercana que beber esta orina.
"Te mueves bien", sonríen detrás de él, lo que hace que Kim se estremezca.
Una botella de agua fría cae sobre su regazo y un tipo alto se sienta a tu lado. Jimin mira al hombre desconocido en estado de shock y se ríe a carcajadas.
- ¿Qué? Tómate el agua fría.
Jimin abrió silenciosamente la botella, tragó el líquido vivificante y miró al extraño: un hombre de cabello castaño con ojos oscuros, casi negros, con manos fascinantes y fuertes que te dejan sin aliento, y un lunar íntimo en su cuello que quieres tocar con tus dedos.
Kim involuntariamente se da cuenta de que está mirando al chico más tiempo del esperado, pero simplemente no puede detenerse.
Demasiado atractivo.
-¿De dónde eres? – pregunta de repente el chico, mirando en dirección a Jimin, haciéndolo avergonzarse y apartar la mirada, mirando las zapatillas. Esta zona está repleta.
- ¿Qué quieres decir con que está lleno? – Jimin frunce el ceño, tirando la botella vacía. No me di cuenta de que estaba marcada.
"Ahora lo marcarás con tu sangre si respondes", amenaza el chico, y luego sonríe irónicamente y huele a Jimin, arqueando una ceja. Entonces eres una perra, ¿o qué? Es extraño, es la primera vez que te veo...
- ¿Qué? ¿Perra? – Jimin grita indignado, de alguna manera bastante juvenil.
- ¿Chico nuevo? Ahora está claro, el hombre de cabello castaño asiente para sí mismo, examinando al omega. Pero hay algo mal contigo... No eres el tipo de Yoongi-hyung en absoluto.
- ¿Cómo es esto? – se sorprende Jimin, mirando sus grandes ojos oscuros. Bueno, ¿Quién le gusta entonces?
- Bueno, sus dos perras anteriores parecían de alguna manera más pretenciosas y elegantes, el extraño le quita con desdén la camiseta sudorosa de Jimin, sonriendo. Definitivamente no usarían esos harapos... ¿Eres tan bueno en la cama?
- Aparentemente sí, sonríe Jimin, acercándose a la cara del chico. ¿Quieres comprobarlo?
- No, en esta ciudad todo el mundo sabe que la propiedad de Yoongi-hyung no puede ser tocada, el chico presiona sus dedos en la frente del omega y la aleja de él. Además, no me gustan los usados.
- ¡Ay, tú! – Jimin se ahoga de indignación y golpea dolorosamente al castaño en el brazo, frunciendo el ceño y haciendo pucheros. ¿Cómo te atreves?
- Oh, ¿Quién está ofendido aquí?, el chico se ríe burlonamente, tirando de la mejilla de Jimin.
Kim vuelve a temblar y, sin darse cuenta de que está sentado en el borde del banco, se derrumba épicamente y cae sobre el asfalto, golpeándose dolorosamente el coxis.
"Um", Jimin gime y hace una mueca de dolor, tratando de levantarse.
- Aparentemente, realmente haces un buen trabajo por la noche, ya que tu hyung te mantiene cerca de él, se ríe el extraño, a lo que Jimin solo frunce el ceño con disgusto y, agarrando su bolso, se aleja, sin darse la vuelta, pero sintiendo la mirada abrasadora de unos ojos castaños oscuros en su espalda.
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Quiéreme (Kookmin)
FanfictionA Jimin se le deben subir las hormonas a la cabeza, porque de lo contrario no puede explicar su lánguido gemido y un beso húmedo en los labios de otra persona. Al chico no le importa que le puedan privar de sus cosas más valiosas, lo quiere aquí y a...