Ella es para mí.👫🏻🫶🏻♥️

③④

MARATÓN 2/4.

T/N BELTRÁN.

- ¿Te gusta? - le pregunto en un susurro, mientras mis mejillas empiezan ruborizarse.

Cesar me ha sacado el vestido y he quedado con el conjunto picante que me ha regalado Franco.

- Wow, nena...te ves fantástica. Soy un hijo de puta suertudo - él se pasea muy cerquita de mí, alucinado y con los ojos muy oscuros recorriendo mi cuerpo, pero no me toca.

Mi cuerpo pide a gritos que me toque y mi entrepierna anhela atención.

Cesar se queda parado delante de mí, y con el dedo del corazón toca mi cuello y recorre la línea del brasier al borde de mis pechos.

Mi respiración se acelera y mi sexo está muy mojado. El dedo travieso de mi marido recorre mi brazo hasta llegar a mi espalda, provocándome un escalofrío por todo el cuerpo. Estoy de espalda a Cesar, mirando la cama.

- ¿Confías en mí? - pregunta de pronto, en mi oído con tono seductor y su dedo se desliza hacia adelante nuevamente, él me está provocando deliberadamente, y no me puedo resistir.

- Por supuesto - jadeo. Mete el dedo dentro del brasier y acaricia un pezón.

- ¡Ah! - gimo.

- Silencio - ordena y sigue acariciando el pezón provocando que mi sangre hierva. Ahogo mis gemidos y muerdo mi labio.

Cesar, abandona el pezón y su dedo se desliza en el vientre bajando hasta mi sexo.

- ¡Ah!

- Cesar.

Besa mi cuello, y suelta los ligueros.

- Quiero jugar...pero necesito que confíes en mí - no entiendo ¿Jugar? ¿A qué se refiere?

- ¿Qué quieres hacerme? - en estos momentos haría lo que fuera por él. Incluso sería capaz de ir hasta esa habitación roja que tiene en la planta de arriba.

- No te haré daño - besa mi cuello nuevamente.

Dios...este hombre me excita a más no poder.

- Juguemos - las palabras salen automáticamente de mi boca.

Cesar se acerca a su armario y saca una corbata gris ¿Para qué quiere una corbata? ¿Piensa salir? ¿Y su otra corbata? Ahora que recuerdo se la quitó durante el cóctel.

- Juntas las manos por delante - me ordena sacándome de mis cavilaciones.

- ¿Ah?

- Solo confía en mí - me suplica. Hago lo que me ha dicho.

Cesar me rodea las muñecas con la corbata y le hace un nudo apretado.

- Oye, ¿Qué haces? - estoy sorprendida y desconcertada.

- No digas nada...te gustará - dice sonriendo como si ocultara un secreto.

El pulso se me ha disparado y el corazón late un ritmo frenético. Estoy algo asustada y muy excitada.

Me empuja sobre la cama y él encima de mí. ¡¿Me follará atada?! ¡Uy! Quiero ver eso y sobre todo sentirlo. Me levanta las manos por encima de la cabeza.

- No te muevas - susurra y se apodera de mis labios besándome con pasión - Deja tus manos así ¿Entendido? - interesante vamos a ver como continúa.

- De acuerdo - respondo agitada.

Él se levanta. Lleva puestos sus pantalones y su camisa desabotonada.

- Terminaré de desvestirme.

¡Siii! Me encanta ver sus fuertes brazos, su marcado abdomen, todo su hermoso cuerpo. ¡Vamos, Parra! Apresúrate, cierta parte de mi cuerpo está muy húmedo pidiendo tu atención.