Lunas Cruzadas

La Energía del Bosque

El día comienza con un ambiente relajado, pero cargado de expectativas. Sunny baja a desayunar, encontrando a toda la familia reunida en la mesa, incluidos sus hermanos y su mejor amiga Susana. La madre de Sunny, Eva, ha preparado un festín, y el aroma de pan recién horneado llena la casa.

Mientras todos comen, el padre de Sunny, Alexander, toma la palabra con su tono firme pero protector.

Alexander:
—Hoy será un día importante. Quiero que recuerden lo que les enseñé sobre la energía de la naturaleza. Sunny, Susana... ustedes también deben aprender a conectarse con el bosque. El entrenamiento no solo es físico. Hay algo más que deben dominar.

Susana, que siempre ha tenido un aire juguetón, se inclina hacia Sunny y le susurra al oído:

Susana:
—¿Crees que esto de la energía nos ayudará a ser mejores que ellos? Ya estoy cansada de que siempre nos ganen.

Sunny sonríe ante el comentario de su amiga, pero su mente está enfocada en lo que vendrá. Su padre sigue hablando:

Alexander:
—Zander, Aziel, Marcos... ustedes deben cuidarlas, especialmente a tu hermana. El bosque es un lugar poderoso, pero puede ser peligroso si no se respeta.

El padre de Sunny entonces habla sobre cómo la energía de la naturaleza fluye a través de todo ser vivo, y cómo pueden canalizarla para aumentar sus habilidades sensoriales. Le recuerda a todos que deben aprender a sentir el bosque, no solo verlo o escucharlo, sino fundirse con él.

Una vez terminan el desayuno, el grupo se dirige hacia el bosque. La tensión aumenta sutilmente cuando entran en las profundidades del lugar. Todos pueden comunicarse telepáticamente, una habilidad natural entre los lobos, pero Sunny no puede escuchar sus pensamientos, lo que la hace sentir un tanto aislada.

Zander, el hermano mayor, explica las reglas del entrenamiento:

—Hoy vamos a trabajar en parejas. El objetivo es que logren encontrar a sus compañeros usando solo sus sentidos y la energía del bosque. Deben confiar en el flujo de la naturaleza para guiarse. Cada uno tomará un camino diferente, y deberán mantenerse en silencio.

Parejas:

Sunny es emparejada con su hermano menor, Marcos.Susana se empareja con Aziel.Zander va con su beta, Dylan.

Se adentran más en el bosque, y Sunny comienza a sentir una conexión sutil con la naturaleza. No es tan fuerte como la de sus hermanos, pero nota que algo ha cambiado desde la última vez que estuvo en este lugar. El susurro de las hojas, el crujir de las ramas bajo sus pies... todo parece más vivo, como si el bosque le estuviera hablando.

Su hermano menor, Marcos, le sonríe y comenta:

Marcos:
—Estás mejorando, Sunny. Puedo sentirlo. El bosque te está aceptando.

Sin embargo, mientras avanzan en su entrenamiento, Sunny empieza a sentir una sensación extraña, similar a lo que ha experimentado en los últimos días. Es como si alguien la estuviera observando, pero más que eso, siente peligro. Se lo menciona a Marcos, quien, al principio, piensa que es solo su imaginación. Pero entonces, el aire se vuelve pesado, y ambos se detienen.

De repente, son rodeados por un grupo de desconocidos. Son pícaros, mercenarios, que claramente no tienen buenas intenciones. Uno de ellos, un brujo oscuro, se adelanta y habla con una voz siniestra:

Brujo:
—No queremos problemas. Solo queremos a la chica.

Marcos, que hasta ahora estaba tranquilo, cambia de actitud de inmediato y adopta una postura defensiva.

Marcos:
—No van a llevarse a nadie.

Pero los pícaros son demasiados. Aunque Marcos es ágil y fuerte, no puede contra tantos. Sunny ve cómo su hermano trata de pedir ayuda telepáticamente a Zander, pero algo lo bloquea. El brujo ha creado un escudo que interrumpe las comunicaciones.

La pelea comienza, y aunque Marcos pelea con valentía, el enemigo es abrumador. Sunny está paralizada al ver cómo su hermano es golpeado y finalmente lanzado contra un árbol, quedando inconsciente. El dolor en su pecho es indescriptible. No puede dejar que lo maten por su culpa.

Sunny (gritando):
—¡Paren! ¡Me entregaré! Pero no le hagan daño.

Los pícaros se detienen, y el brujo sonríe con malicia. Sunny siente un frío recorriéndole la espalda mientras los ojos del brujo se fijan en ella. Es lo último que recuerda antes de que todo se vuelva negro.