CESAR PARRA.
Antonio impidió que mate al maldito de Cornelio, pero aun así le di una paliza, le rompí el labio, le di unas patadas por las costillas, incluso le quite la silla que sostenía con la intención de golpearme y fui yo quien lo golpeo con la silla, pero para mí no fueron suficiente. Quería matarlo por besar a mi mujer.
- Tranquilo, muchacho - me suplica Antonio.
- Ella volverá a mí, cuando te aburras de ella y la dejes - susurra el maldito tirado en el suelo.
- ¡Cállate, Cornelio! ¡Ya suficiente mal rato nos ha hecho pasar! - Antonio, levanta a Cornelio desde la solapa - Ahora desaparece de mi vista antes que deje que mi yerno te mate.
- Escucha, maldito. Tendrás que morirte esperando antes que deje ir a mi mujer. ¡¡Ella me ama a mí, así como yo la amo a ella!! - maldito.
- ¿Y la seguirás amando cuando se transforme en una morsa gorda y fea por el embarazo?
- ¡Maldito! - quiero matarlo.
- ¡Basta los dos! - grita Antonio.
Mi suegro saca a empujones al maldito de Cornelio.
Le doy un puñetazo la puerta. Antonio debió dejar que yo mate a ese malnacido. Es un maldito desgraciado.
Inhalo y exhalo tratando de calmarme. Debo tranquilizarme, T/n no debe verme así.
-Tendrás que limpiar este desorden - espeta Antonio, entrando a la cocina nuevamente.
Miro a mi alrededor; la mesa está volteada al igual que las sillas. Incluso hay una silla rota. Esa silla se rompió en el cuerpo del maldito.
- Lo siento...pagaré por este desastre - le digo.
- Debiste sacar a Cornelio afuera de la casa si ibas a golpearlo - me riñe, mientras levanta la silla,
- Para la próxima lo tendré en cuenta.
- No habrá próxima. Escuche, joven. Usted no es ningún adolescente para andar peleando o rompiendo cosas, usted está bastante crecidito y peludito y desde ahora en adelante se comporta como lo que es, un hombre casado y padre de mi nieto - me recrimina.
- La culpa fue de ese malnacido, por besar a mi esposa - pongo énfasis en mi esposa.
Ayudo levantar la mesa y acomodarlo como estaba.
- Lo que hizo Cornelio estuvo mal, pero tu reacción fue desmedida por poco y lo mata.
- Si vuelve acercarse a T/n, lo mato.
- Si se acerca a mi hija o no, eso lo decide ella y no usted - ¿Qué? - Ella decide si va a seguir viéndolo o no al igual que usted y sus "Amistades"
- Ya entendí, Antonio - si tengo que dejar de ver a Reina para que T/n no vuelva ver a Cornelio lo haré - Iré a ver a mi esposa.
Entro a la habitación y T/n, no está ¿Dónde mierda se metió? Me doy cuenta de que la ventana está abierta ¡Maldición! Se ha ido. Empiezo entrar en pánico de inmediato. Me ha dejado.
- ¿Y mi hija? - pregunta Antonio, entrando a la habitación.
- Se fue - respondo con tono apenas audible, mientras me dejo caer en la pequeña cama. Tengo el corazón atravesado en la garganta.
- Se escapó por la ventana, hacía mucho que no se escapaba por la ventana - murmura Antonio, como si fuera lo más normal del mundo - Seguramente salió a caminar o tal vez fue a su cafetería favorita aquí en Tucson - pongo toda mi atención en lo último que dijo mi suegro.
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Ella es para mí.👫🏻🫶🏻♥️
ParanormalUna fiesta de máscaras, que lo cambia todo. Una hermosa mujer, que salva a un extraño de ser asesinado. Un hombre inteligente, y mujeriego. Que no sabe quién quiere deshacerse de él. Una amenaza que lo llevará conocer lo que nunca imaginó, y lo que...