Ella es para mí.👫🏻🫶🏻♥️

⑤④

CESAR PARRA.

- ¡Omar! - grita Elizabeth.

- ¡Ese maldito le dio un balazo mi pierna! - grita Omar, mientras cae al suelo.

De repente siento como alguien me toma por la cintura y me empuja hasta que me meten dentro de un auto. Cuando ya estoy dentro del auto, cierran la puerta. Todo pasa muy rápido.

Desde la ventana del auto observo como la policía se abalanzan encima de Elizabeth y Omar. Ella grita desesperadamente que lo suelten, pero los policías lo empujan al carro policial y Omar lo suben a otro.

- ¿Señor Parra, se encuentra bien? - me pregunta Swayer, él fue quien me empujó hasta el auto.

- Estoy bien - trato de calmar mi ritmo cardiaco. Pero recuerdo que mi hijo ha nacido.

- ¡¡¿T/n, está bien?!!

- No lo sé, señor.

- Lléveme al hospital. Debo ver ya a mi esposa - no tengo tiempo para ver qué sucede con esos malnacidos. T/n, me necesita.

Antonio, abre la puerta del auto y entra Kevin, pálido incluso en shock. Para él debe ser muy difícil esta situación.

- ¿Por qué? - susurra para sí mismo.

Swayer, enciende el motor y el auto empieza moverse.

- ¿Qué sucedió con Jason? - que esté bien por favor.

- La información que tengo es que ya fue operado y lograron sacarle la bala.

- ¿Pero él está bien? - estoy preocupado por mi chofer.

- Sí, señor. Jason va a recuperarse - respiro aliviado.

- ¿Elizabeth, hizo todo esto? - susurra Kevin.

- Tu hermana, mató a mi hermano, ella siempre estuvo detrás de mí, para hacerme desaparecer y quiso inculpar a Christian. No descansaré hasta hacerle pagar todo el daño que hizo - le digo para que se entere.

- No puede ser cierto. Dígame que miente, por favor - me suplica.

- Lo siento, pero no miento. Elizabeth es la asesina de mi hermano y quiso matarme a mí también.

- No...esto no está pasando, tiene que ser una pesadilla, mi hermana nunca haría algo así - Kevin, estalla en llanto - ¿Cómo se lo diré a mis padres? Ellos se morirán cuando se enteren de lo que ha sido capaz, Elizabeth.

Swayer se incorpora al tráfico y yo tengo que soportar a Kevin, que llora como niño chiquito. No puede creer que su hermana es una asesina.

- Cálmate - le digo incómodo al ver que no deja de llorar ¡Por dios es psicólogo!

- Perdón por lo que Elizabeth, le hizo a tu familia - susurra.

¿Perdonarlo? ¡A esa perra no lo perdonaré nunca! ¡La hundiré en la cárcel! Por su culpa, pensé mal de mi hermano y ahora él no está para pedirle perdón ¡Nunca más va a estar! ¡Nunca tendré la posibilidad de pedirle perdón! Cierro mis manos hasta convertirlo en puño. Maldita seas Elizabeth Ibarra, maldito el momento en que te cruzaste en la vida de mi hermano.

- Sé que lo que te diga en estos momentos no será suficiente para reparar todo el daño que Elizabeth les hizo, pero yo te pido perdón.

- Tú no tienes culpa de las atrocidades que ha cometido esa maldita - hace un año atrás le hubiera partido la cara a Kevin, tratando de buscar un culpable, pero en estos momentos, siento que soy un poco más comprensible. Mi esposa y mi hijo me han hecho ser mejor ser humano. Mi pequeño hijo, mi mayor deseo en estos momentos es que tú y tu madre estén bien, si ustedes están bien, yo lo estaré.