𓂀 𝕀𝕟𝕤𝕚𝕕𝕖 𝕄𝕖 [𝕂𝕠𝕠𝕜𝕄𝕚𝕟] 𓂀

FINAL

Era un hecho que JiMin no existía en la vida de todos los trabajadores del hospital psiquiátrico. El haber hablado con el Doctor Seokjin, quien por cierto, parecía ser una persona totalmente diferente, había pedido disculpas al castaño, ya que debido al accidente se había perdido la investigación con paciente YoonGi, quien desafortunadamente había muerto aquella noche junto con la enfermera Elaine. 

JungKook sólo asentía ante todo lo que decía, restándole importancia y que honestamente no importaba. Lamentaba la pérdida de ambos, un paciente que vio en ocasiones en los pasillos, y Elaine, que no quería crear teorías de cómo había muerto.

Ni siquiera sabía qué es lo que había vivido según en la mente de los trabajadores del hospital, y si era honesto, no quería dar más vuelta al asunto.  Quería olvidar todo, absolutamente todo lo malo en el lugar y sólo quedarse con lo único bueno vivido en su corazón; JiMin. En estos momentos deseaba volver con él a casa junto con Taehyung.

Dos días habían pasado luego del incendio, Jin se mostraba triste ante lo obvio pero misteriosamente tranquilo teniendo aquel chico de cabello negro a su lado, al cual llamaba Namjoon. No quería ser metido, pero por las miradas que se daban debía ser algo más que una simple amistad.

Agradeciendo la buena atención y por supuesto, la despedida, JungKook se levantó de la silla de aquella cafetería, agradeciéndole al mayor la confianza dada en el transcurso del trabajo y pidiendo disculpas por la tragedia del hospital.

Su jefe directo le había llamado justo el día que el accidente se había dado, y tal parecía ser que él tampoco tenía idea de quién era JiMin. Tal parecía que el caso se había enfocado en el paciente YoonGi, un chico con el cual jamás en aquellos días habló, y no porque él no quisiera, sino porque básicamente sólo hablaba con Hoseok.

JungKook finalmente llegó a casa, en el trascurso sacando la llave de su bolsillo para abrir la puerta. Estaba algo cansado, Jin le había citado en un lugar lejos de casa. Había tenido que caminar, el dinero era menos cada vez gracias a que el caso no se había resuelto. Cuando tuviese dinero lo primero que haría sería comprarse un carro, se lo había auto jurado.

—¡Llegué! —avisó JungKook en voz alta, donde unos rápidos pasos se dirigieron a él, y sabía que no era precisamente Taehyung.

—¡Kookie!

Sí, era JiMin, su dulce, hermoso y preciado ángel.

—Minnie —recibiéndole en un abrazo, JungKook le besó su coronilla, donde pudo darse cuenta que estaba mojado, lo que provocó que frunciera el ceño y le mirara el cuerpo, notando que estaba con una toalla amarrada en su cintura —¿Te has bañado?

—¡Síp! —pegó su cabello a la nariz de JungKook, quien riendo hizo su cabeza para atrás —¿Huelo rico? Ahora ya no huelo a medicinas.

—Claro que sí, bebé, nunca oliste feo para mí —tomándole de la cintura, JungKook finalmente besó sus labios, donde JiMin le recibió gratamente y correspondió al beso. Sus labios se movieron entre sí y los chasquidos no tardaron en darse.

—¿Podrían parar y ayudarme con esto? Gracias —asomándose en el pasillo, Taehyung interrumpió la escena, donde estos claramente se separaron, tomándose de las manos para dirigirse con el castaño —Venga, gracias, se les agradece mucho.

—Eres un exagerado, eh —JungKook le recordó, donde su hermano le aventó un pedazo de lechuga.

—Cuidado o no te toca carne —demandó.

—¿Carne cocida o quemada?

—JungKook, no seas así —JiMin le apretó su mano, sonriendo ante la tierna escena de los hermanos.