Capítulo dieciséis

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—A los cinco años, nos preguntaron que queríamos hacer al crecer, respondíamos cosas como: astronauta, presidente o en mi caso una princesa. A los diez años, preguntaron otra vez, respondíamos roquero o vaquero o en mi caso ganadora de una medalla de oro. Pero ahora hemos crecido, quieren una respuesta seria, bueno, ¿qué tal esta? "¿Quién diablos sabe?". Este no es el momento de tomar decisiones duras sino el de cometer errores; tomar el tren equivocado y perderte en algún lado; enamorarnos... mucho; estudiar filosofía con lo que no se puede tener una carrera; cambiar de idea y cambiar otra vez porque nada es permanente. Cometamos todos los errores posibles, así cuando nos pregunten qué queremos ser, no tendremos que adivinar, lo sabremos.

Cientos de alumnos, profesores y familias se pararon de sus sillas y comenzaron a aplaudir.

Hannah sonreía felizmente mientras miraba a sus hermanos uno por uno retirar sus diplomas.

La castaña estaba al lado de sus padres, presenciando la graduación de sus hermanos.

Había perdido la cuenta de cuantas veces los vió graduarse y también recordó aquellas veces en las que ella estaba allá arriba con ellos.

Cuando los discursos terminaron, Esme y Hannah fueron las primeras en acercarse a su familia.

—¡Felicidades, Familia Cullen!—Hannah abrazó a Alice y les regalo una sonrisa abierta a todos, disimulando para su alrededor y después se dirigió a la humana—¡Felicidades, Bella! Por ser tu primera vez.

—Gracias Hannah.

—No hay de qué.

—¡Felicidades, Bella!—Carlise apareció detrás de Hannah y saludó a la humana.

—Estamos orgullosos de ti—Esme murmuró con amor.

—Gracias, de verdad.

—¿Y cuándo será la fiesta?—Alice preguntó devuelta.

—¿Mañana?—preguntó Edward.

—¿No era hoy?—cuestionó Jasper

—Hannah aún no tiene su vestido—recordó Rosalie.

—Bella tampoco—Edward también les recordó.

—Es solo una fiesta—murmuró Alice—no tengo problemas con prestarles vestidos a las dos, son mis hermanas.

—Yo no quiero molestar, me conseguiré el mío, yo...

—Bella cariño, no es molestia, Alice está encantada de prestarte algo—Esme le aseguró.

—Es solo por un rato—agregó Carlise.

—Bueno, yo...

—¡Perfecto!—se adelantó Alice y después las miradas cayeron en Hannah—¿Qué hay de ti?

—Sabes que conmigo no hay problema.

—¡Si!—Alice dió un saltito de felicidad—Entonces, ¿está noche?

—Está noche, supongo—aceptó Bella.

—¡Bien!—Alice murmuró y después miró a unas chicas que hizo de amigas que estaban a unos pasos de nosotros—¡Ya vuelvo! ¿Vienes?—se dirigió a Jasper quien le tomó la mano y la siguió sin problema, alejándose entre medio de todos.

—Saludaremos a Charlie—murmuró Carlise y se dirigió a él con Esme.

—Nosostros nos iremos por allá—Emmett tomó a Rosalie y desaparecieron de la vista de los tres que quedaban.

—Bueno, creo que me voy—Hannah habló.

—¿A dónde?—quiso saber Bella.

—A casa, tengo cosas qué hacer y no quiero seguir estar en medio de todos que están acompañados.

Perfect Doom | Twilight | Alec Volturi [Proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora