Parte 24 Los duendes del bosque

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En un bosque encantado situado en las afueras de la ciudad de Goblinlandia vivían unos pequeños hombrecitos con largas orejas y los zapatos con las puntas onduladas.

Los cuales eran muy alegres y se la pasaban todo el día cantando alegres canciones mientras trabajaban en el bosque.

Además de cantar, se divertían haciéndose bromas entre ellos.

Y todos los días eran iguales para estos alegres hombrecitos, pero esto no les importaba.

Hasta que un día la paz que reinaba en aquel fantástico lugar se evaporaría mágicamente.

Porque un ser con intenciones malignas quería apoderarse de aquel maravilloso lugar para deshacerse de aquellos alegres hombrecitos capaces de alegrar todo el bosque solamente con sus canciones.

Porque no le gustaba que los demás estuvieran alegres.

Por lo que estaba dispuesto a capturar a uno por uno a todos aquellos duendes.

Los cuales al darse cuenta de lo que estaba sucediendo salieron rápidamente corriendo, tratando ocultarse de aquel ser tan siniestro, el cual no tenía tan buenas intenciones.

Pero por más que intentaron escaparse no pudieron conseguirlo y de a poco fueron capturados por aquel ser tan maligno, el cual quería deshacerse de ellos.

Y luego de ser capturados, los duendes buscaban la forma de poder huir de él.

Pero, aunque pensaran como podían hacer para escaparse, no sabían cómo hacerlo porque ese ser tan maligno no dejaba de vigilarlos ni por un instante.

Por lo que tenían que buscar la manera de distraerlo para que ellos pudieran huir de allí.

Pero a pesar de que eran muy buenos haciéndose bromas entre ellos, ahora no se les ocurría nada que pudieran hacer.

Ya que pronto se les tenía que ocurrir algo, porque si no aquel ser tan siniestro iba a deshacerse de ellos para siempre, aunque estos querían evitar que eso sucediera, pero aún no sabían cómo podían hacerlo.

Porque ya se estaban quedando sin tiempo para poder huir de aquel lugar, porque aquel ser tan misterioso tenía casi todo listo para deshacerse de ellos.

Quienes lucharían hasta último momento para poder huir de aquel lugar para volver a sus casas.

Y poder volver a cantar tan alegremente como siempre lo hacían.

Pero seguía pasando el tiempo y las cosas seguían igual sin que se les ocurriera nada para hacer.

Y mientras que aquel ser tan malvado ya tenía todo listo para deshacerse de ellos.

Estos aún seguían sin encontrar la solución a lo que les estaba sucediendo.

Entonces fue a buscarlos para llevar su plan a cabo y eliminarlos como lo había planeado.

Sin saber que las cosas no le resultarían como él había pensado.

Porque los encontró en el sitio en el cual él los había encerrado, pero no se imaginaba lo que estaba a punto de suceder.

Pero justo en ese momento uno de ellos comenzó a cantar tan fuerte como pudo.

Y al ver la reacción de este ser tan maligno él comenzó a hacerle señas a sus amigos para que ellos también empezaran a cantar tan fuerte como pudieran y sucedió algo milagroso porque este ser se evaporó mágicamente en el aire sin que ninguno de ellos pudiera encontrarle alguna explicación a lo sucedido. 

 

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Dulces sueños entre nubes de algodónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora