Parte 9 La mochila mágica

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Había una niña la cual vivía en la gran ciudad y tenía una mochila a la que ella quería mucho porque esta era mágica.

Ya que cuando Evelyn tenía algún problema la mochila siempre la ayudaba a resolverlo porque dentro de ella podías encontrar las cosas más extrañas que nunca te podrías imaginar.

Pero un día la niña tuvo un problema y ni su querida mochila podía ayudarla porque resultó que esta había desaparecido.

La buscaba por toda la casa, pero no la podía encontrar y Evelyn estaba muy triste porque su mochila estaba perdida y siempre la sacaba de cualquier apuro.

Quizás en realidad la mochila no se había perdido, sino que simplemente Teddy su gatito que era muy juguetón y travieso se la había escondido en alguna parte.

Pero ella tenía que salir y no podía seguir buscándola. pero tampoco podía hacerlo sin encontrarla porque si le sucedía algo no iba a poder solucionarlo sin su mochila la cual era mágica.

La situación estaba complicada y ya se le estaba haciendo tarde decidió que iba a salir igual, esperaba no tener ningún problema en el camino.

Estaba dispuesta a salir cuando de repente Teddy apareció corriendo con una mochila de color rosa claro la que traía colgando de su boca.

Era la mochila que tanto había estado buscando Evelyn ahora que el inconveniente se había solucionado la niña salió muy alegre.

Estaba andando con su bicicleta cuando pisa algo que le pincha una de las gomas de esta, entonces de su mochila saca un parche para arreglarla y un inflador una vez solucionado lo de la rueda sigue muy alegre su camino.

Ya se le había hecho tarde para llegar a la escuela. pero con su mochila podía solucionarlo muy fácilmente la abrió y sacó de ella un motor el cual le puso a la bicicleta y así pudo llegar a horario.

Durante el recreo estaba jugando con sus amigas y se cayó y al caerse se lastimó la mano cuando se levantó busco la mochila y de allí saco un botiquín de primeros auxilios ella misma se cura las heridas.

Cuando llego a su casa los padres le preguntaron qué le había sucedido ella se los contó, pero ellos mucho no se lo creían.

Al día siguiente se levantaron y mientras estaban desayunando la madre accidentalmente se corta un dedo entonces Evelyn la cura con el botiquín que saco de su mochila.

Ese día el padre decide llevarla en el auto a la escuela por el camino se le pincho una rueda y ella saco todos los elementos necesarios para cambiarla.

El padre se quedó sorprendido con lo que estaba viendo y no sabía que decirle.

Una vez que llegaron a la escuela Evelyn se bajó del auto despidiéndose de su padre.

Entro allí como todos los días, pero en la clase se dio cuenta de que en la casa se había olvidado los útiles entonces le pidió ayuda a la mochila y de ella saco los útiles. El resto de la mañana transcurrió normalmente.

Llego la hora de la salida y se dio cuenta de que se le habían perdido las llaves de su casa y a esa hora no había nadie. Pero metió la mano en la mochila y cuando la saco en ella tenía unas llaves que le sirvieron para abrir la puerta.

Mientras estaba sola en su casa porque sus padres no estaban, se le cortó la luz busco las herramientas para arreglarlo, pero no las podía encontrar entonces tuvo que recurrir a lo que siempre la sacaba de cualquier apuro y de allí saco una caja de herramientas.

Cuando sus padres regresaron ya había vuelto la luz hacía varias horas.

Evelyn le contó lo que le había sucedido y como lo había solucionado y después de la demostración que les había hecho aquel día comenzaban a creerle, aunque les resultaba algo difícil de creer.

Dulces sueños entre nubes de algodónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora