I'm Georgina Schumacher

anxiety

POV GEORGINA

Estaba tumbada en la cama del hotel, intentando descansar. Sentía que mi cuerpo estaba agotado, mi mente seguía en alerta, repasando el accidente una y otra vez, junto con los momentos en la clínica, las discusiones con mi padre, y el beso a Max.

Un golpe fuerte en la puerta me hizo sobresaltar. levantándome lentamente, camine hacia la entrada. Al abrir, lo primero que vi fue a Max, completamente empapado, con el rostro enrojecido y respirando agitado.

—¿Qué ha pasado? —pregunte con un nudo en el estómago, sin dejar de notar el agua que goteaba de su ropa.

Max, visiblemente molesto, pasó junto a mi sin decir nada al principio, frotándose el cabello mojado mientras intentaba calmarse.

—Max... ¿por qué estás mojado? —insistí, esta vez con más urgencia, sabiendo que algo grave había sucedido.

Max giró lentamente hacia mi, la mandíbula tensa y los puños apretados. Finalmente, murmuró con una mezcla de rabia y frustración:

—Charles.

Yo frunci el ceño, sin entender del todo.

—¿Qué tiene que ver Charles con esto?

Max me miró con ojos oscuros, conteniendo la furia que claramente bullía bajo la superficie.

—Discutimos... —empezó Max, respirando hondo como si las palabras fueran difíciles de sacar.

—Ese imbécil...actúa como si no le importaras en absoluto. Como si tu accidente no fuera nada más que un detalle menor. Y entonces, me dijo que solo lo hace porque tú lo rechazaste... porque está celoso... —Max se interrumpió, golpeando el respaldo de una silla con el puño cerrado.

Sentí que algo frío me recorría por dentro. ¿Celoso? ¿Charles? No podía creer lo que estaba escuchando.

—¿Celoso? —repetí en voz baja, incrédula— ¿Por qué discutirían sobre eso?

Max dejó escapar una risa amarga.

—Porque me lo echó en cara. Porque todo lo que hizo hoy, su indiferencia, su frialdad... es porque no soporta que estés conmigo y no con él —Max hizo una pausa, con la mirada fija en el suelo antes de continuar— Y, por supuesto, él no podía aguantar eso, así que... me golpeó.

Me quedó inmóvil por un momento. No podía creer lo que estaba escuchando. Mi mente corría en mil direcciones a la vez, intentando procesar la escena. Luego, la visión de Max empapado volvió a mi mente.

—¡¿Golpeaste a Charles?! —pregunte, más como una afirmación que una pregunta.

Max asintió, su mandíbula tensa nuevamente.

—Él me golpeó primero. Le devolví el golpe, y ambos terminamos en la piscina. —Hizo una pausa antes de agregar— Esto es lo que causa su maldita arrogancia. Se cree intocable.

Respire profundamente, sintiendo una mezcla de sorpresa, rabia y cansancio.

—Esto... esto es una locura —susurré, pasando las manos por su cabello, sintiendo la presión en su pecho aumentar—. No quiero que te metas en problemas por él, Max.

Max me miró a los ojos, suavizando un poco su expresión.

—No estoy preocupado por mí. Me preocupa lo que él te haga a ti, Geo. Es obvio que no es solo su indiferencia. Él quiere verte caer.

Sentí un nudo en la garganta. Sabía que Max tenía razón. Charles había cambiado, y si estaba dispuesto a pelear con Max, había algo más detrás de esa actitud. Pero lo que realmente me dolía era que todo esto estuviera ocurriendo por culpa mía.