-Sé que nuestra relación ha sido complicada, llena de muchas discusiones y problema en pista-, continuó Max, su voz resonando en el aire tenso entre nosotros. -Pero en medio de todo ese caos, algo ha crecido en mí, algo que no puedo ignorar más-.
Lo miré con atención, incapaz de apartar la mirada de sus ojos sinceros. Una mezcla de sorpresa y curiosidad se reflejaba en mis propios ojos mientras absorbía cada palabra que salía de sus labios.
-Me has desafiado de maneras que nunca imaginé-, prosiguió Max, sus palabras impregnadas de una intensidad. -Me has hecho cuestionar quién soy. Y a medida que pasan los días, me doy cuenta de que quiero estar contigo. Muchas partes de mí desean conectar contigo. Me has flechado en cuerpo, alma y corazón-.
Hubo un momento de silencio tenso entre nosotros, el cual fue roto solo por el suave susurro del viento.
-Cada carrera que tengo a tu lado es como una vuelta perfecta en el circuito de la vida: llena de emoción, adrenalina y la certeza de que juntos podemos conquistar cualquier desafío que se nos presente. Y así, con el rugido de los motores como fondo y el aroma a gasolina en el aire, quiero confesarte que mi corazón late más rápido cada vez que estás cerca.-
Max me miró con aquello, por cada palabra de la profundidad de su confesión.
-Puedo entender si esto te toma por sorpresa-, su voz suave y cargada de emoción. -No espero que me respondas de inmediato, ni siquiera espero que me respondas. Solo quería decirlo...-
Me di cuenta de lo difícil que debía de haber sido para él abrirse de esa manera, exponiendo sus sentimientos sin saber qué esperar a cambio.
Asentí lentamente, tratando de encontrar las palabras adecuadas para expresar lo que sentía. Podía ver cómo sus ojos se cristalizaban ligeramente, como si contuvieran lágrimas que amenazaban con caer en cualquier momento. Quería decirle que entendía, que apreciaba su sinceridad, pero en ese momento, las palabras parecían escaparse de mí.
Finalmente, encontré la voz para responder, aunque fuera con la más simple de las respuestas.
-Gracias por compartirlo conmigo-, murmuré, dejando que mis propias emociones se reflejaran en mis ojos mientras lo miraba.
Me levanté de la silla e hice que el tambien se levantara, para luego mirarlo y tomar sus manos junto con las mías.
-Max...esto es mucho para procesar. Me has tomado por sorpresa y siento que estoy luchando para entenderlo todo. Quiero ser honesta contigo: tus palabras me hacen sentir apreciada. sobre nosotros, pues es un tema algo complejo...pero se que no es imposible, Disculpa si de verdad no tengo las palabras adecuadas para expresarme, porque no soy para nada buena en esto. Mierda soy pésima jajajaj.- decía entre suaves risas, realmente estaba muy nerviosa, mis manos sudaban.
-Tranquila, lo entiendo perfectamente- Max me miraba con una mezcla de sorpresa y deseo intentaba explicarse, pero decidí interrumpir sus palabras besandolo.
Mis manos se deslizaron hacia atrás de su cuello ambos profundizábamos el beso. De repente, Max me levantó y me sentó sobre la mesa, abriendo mis piernas para acercarse más. La intensidad del momento me hizo detenerme un instante, separándome de él.
-Espera, espera-, murmuré con una sonrisa pícara. -Recuerda que estamos en un lugar público... al menos... vayamos a otro lado-, sugerí con un guiño, dejando la idea para continuar nuestra aventura en un lugar más privado.
Decidimos dejar el restaurante y buscar a donde ir para continuar nuestra velada. Subimos a la moto y él arrancó el motor con un rugido, indicándome que me abrazara fuerte.
ESTÁS LEYENDO
I'm Georgina Schumacher
RomanceGeorgina Schumacher lleva encima el peso de ser la hija de uno de los pilotos más aclamado en el mundo de la F1. Su nombre resuena cada que se habla de velocidad y su himno cada fin de semana. ★・・・・・・★ -Si no compites para ganar, ¿entonces para que...