Nos escanearon como en los aeropuertos, levantamos nuestras manos, y nos retiraron las armas que portábamos.
—Mi amigo sudamericano me dice que no son lo que aparentan ser. Dijo el jefe de aquellos delincuentes.
—La especialidad de mi amigo Valdez, es precisamente descubrir a los mentirosos. El me asegura que ustedes son de alguna organización estadounidense.
—Si les encuentro culpables de engañarnos. La muerte será una dulce recompensa, comparado a lo que les hacemos aquí a los que juegan con nosotros.
—¡De haber querido que nos insultaran de esta manera! Y ¡De haber querido perder nuestro tiempo! Habríamos ido al Medio Oriente. Y quizás ahí estarían más interesados en lo qué hay en nuestros portafolios, que en nuestra apariencia elegante y distinguida.
Mi respuesta no pareció sacarnos del predicamento, si no todo lo contrario.
—¡Con que eres muy valiente! ¡Mexicano!
—Me agradan los valientes, solo por eso te daré una oportunidad.
El jefe de los traficantes solicitó una de las armas que nos retiraron.
Le quitó el cargador y dejó solo una bala en la recamara.
—Tu me caes bien, pero tu amigo no me agrada, es muy silencioso y esta sudando a gotas.
—Debe ser el cambio de clima, de donde el viene es muy fresco en esta época.
—¡Puede ser! Aún así, quiero que le metas un tiro. Demuestra que eres uno de los nuestros.
Me entregó el arma, y mire el rostro de mi amigo, se cuestionaba con la mirada si sería capaz de dispararle.
—No es fácil conseguir buenos socios en este negocio ¿Estás seguro de que no hay otra manera?
—Otra manera es que ustedes dos salgan de aquí en pedazos pequeños para alimentar a los peces.
—Esta bien. Dije mientras le apuntaba a mi compañero. —Lo siento Alan. Exclamé.
Luego dispare a la única lámpara que iluminaba la habitación, y casi al mismo tiempo me lancé sobre mi compañero derribándolo al piso.
Al instante se escucharon ráfagas de disparos en todas direcciones. Los destellos medio iluminaban el entorno, pero había gran confusión. Por mi parte yo había memorizado la entrada y nos arrastramos hacia ella. Sin embargo un calor intenso y al mismo tiempo humedad en mi brazo izquierdo se hicieron presentes.
Giramos la perilla y salimos por esa puerta que conducía a la azotea del edificio.
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Transiciones
FantasyNarra la historia de un joven con mucha imaginación, lleva una vida complicada y logra entrar en mundos y universos diferentes donde vive aventuras increíbles y se convierte en los más extraños personajes, luego vuelve a su realidad hasta que le cue...