Mientras más se acercaba a lo que pensaba que eran los baños, los sonidos se volvían más intensos, hasta que finalmente logró reconocer lo que escuchaba: gemidos femeninos. Su corazón comenzó a latir más rápido, y trató de retroceder sin hacer ruido, pero un mal paso lo delató, haciéndolo tropezar y golpear una de las puertas.
—¿Quién anda ahí?— Esa voz... Felix la reconocería hasta bajo el agua. Era Hyunjin.
El miedo lo paralizó, no emitió ningún sonido. Trató de levantarse rápidamente, con la esperanza de salir corriendo antes de que Hyunjin lo vea, pero antes de poder escapar, la puerta se abrió y Hyunjin salió con la camisa del equipo arrugada y el cabello revuelto.
—¿Felix? —lo miro con sorpresa.
—¡Lo siento! Ya me iba —dijo Felix rápidamente, cubriéndose los ojos con la mano, abrumado por la vergüenza, mientras se daba la vuelta para huir.
—Espera —Hyunjin lo detuvo, agarrándolo suavemente del brazo antes de que pudiera irse.
—Vete —dijo Hyunjin de repente, pero no a él. Su mirada se dirigía hacia la chica con la que estaba. La chica, confundida, levantó una ceja.
—¿Qué?
—Que te vayas —repitió Hyunjin, con un tono más firme. Si yo fuera ella, me habría ido en ese instante. Pero, como no soy ella, y estoy profundamente embobado con este hombre, probablemente me habría quedado. La chica, molesta, tomó su cartera y se fue, no sin antes chocar a propósito contra mí y empujarme ligeramente.
—Yo... yo solo venía a los baños, lo siento —murmuró Felix, todavía en shock y avergonzado.
—¿A los baños? Rubio, estos son los vestuarios. Los baños están al lado —Hyunjin sonrió.
—¿Podrías... dejarme ir? Realmente necesito ir al baño. —Intento mantener la calma, pero mi cuerpo está tenso bajo su mirada.
—Creo que puedes aguantar unos minutos más. —Hyunjin se inclina un poco hacia mí, todavía manteniendo ese tono juguetón—. Me interrumpiste con esa chica, Felix. —Suelta suavemente mi brazo.
—Ya dije que lo sentía, pero tú la sacaste de aquí. —Trato de alejarme de él. —No todo es mi culpa.
—Si lo es —responde, levantando un dedo y apuntándome con él—. ¿Sabías que esto no eran los baños y viniste a interrumpirme solo por tus celos?
—Creo que la sangre no está llegando a tu cerebro y las ideas no te están fluyendo.— Mi cuerpo se tensa por aquella acusación. — Eso o eres realmente un idiota.
—Solo era una de mis opciones.
—Tengo que irme. —Me doy la vuelta para salir de los camarines, pero siento una mano posarse en mi hombro.
—¿Me interrumpes con esa chica y ahora solo te vas? —su boca hace un puchero. —Eres tan cruel, Felix.
—Yo... yo lo siento, Hyunjin.— Su mano baja hacia mi cintura y su toque hace un escalofrío por todo mi cuerpo; sus ojos están fijos en los míos; mientras se acerca ligeramente a mi rostro, su nariz choca con la mía. En un movimiento rápido sus labios hacen contacto con mi cuello. Deja besos mojados a lo largo de mi piel, hasta que llega al lóbulo de mi oreja y lo chupa ligeramente. Mis piernas comienzan a debilitarse y, si no es por Hyunjin, que me sostiene firmemente, ya estaría en el suelo.
Una presión nace en lo bajo de mi vientre y no puedo creer todo lo que me está causando eso con solo besar mi cuello. Su respiración se acelera, al parecer no soy el único afectado por esto. Cuando termina su ataque en mi cuello, prosigue a besar un lado de mi cara y sigue moviéndose a través de mi mejilla, hasta que presiona sus labios en la esquina de los míos. Abro mi boca en anticipación, esperando el contacto, esperando sus labios contra los míos, pero nunca llegaron.
Hyunjin se separa de golpe.
Sus ojos no hacen contacto con los míos—Olvida lo que acaba de pasar.
—¿Qué? —mi voz tambalea.
—Solo vete.
Me alejo de él con mi mirada perdida; realmente se está arrepintiendo en mi puta cara. Sin decirle nada más, me doy la vuelta y me largo del baño dejándolo completamente solo.
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Nervous
Teen FictionFelix tiene de primer amor a su vecino Hyunjin y trata de conquistarlo sin saber lo que le espera a futuro