🌻Dunk🌻

23 3 0
                                    

He comenzado un juego del que me arrepiento. Han pasado ya dos semanas desde que nos confesamos, desde que pensé que un poco de juego sería divertido... spoiler: no lo es. Mi orgullo es demasiado grande y Joong demasiado astuto. No sé cómo puede soportarlo; empiezo a pensar que yo he caído más profundo que él porque lo veo muy cómodo, mientras que yo me subo por las paredes.

Ahora estamos en la biblioteca, poniéndonos al día con la tarea que teníamos en común. Estoy concentrado buscando un artículo que necesitamos incluir, pero noto que me está mirando, mientras su mano juega con el cabello de mi nuca.

—Dunk, bebé, ¿por qué no descansas y continúo yo?

—Estoy bien. Si quieres ayudar, ¿por qué no vas por agua? No nos queda y tengo sed.

—Lo que desees, cariño.

Deja caer sus labios en mi hombro, sin llegar a besarme, solo los apoya, y se marcha.

Me provoca. Hace pequeños contactos a los que no puedo negarme porque no llegan a ser tan íntimos; tampoco lo verbaliza, así que me deja a mí la decisión. No me pide nada, no parece desesperado, ni es demasiado obvio en sus provocaciones.

Creo que nadie más que yo ha notado sus cambios.

Y yo ya estoy desesperado. Dos semanas desde que nos besamos.

DOS MALDITAS SEMANAS.

Sí, no lo estoy llevando nada bien. Esperaba verlo a él en este estado, esperaba que no durara más de un par de días para que me acorralara en medio del pasillo y me robara el aliento. Tonto de mí.

Genial. ¿Y ahora qué hago? No quiero compartir esto con First ni con nadie; ya bastante idiota me siento.

Me suena el móvil. Lo agarro y en la pantalla aparece el nombre de Pond. Contesto.

—Hola, Pond.

—Hola, pequeño. ¿Qué haces? Llevo unos días detrás de ti, pero parece que nunca tienes tiempo para mí.

—¡Ohh! ¿Te sientes abandonado, Bro?

—Me has abandonado. Vamos, solo un café, o puedo ir a cenar a tu casa y así también veo a tus padres.

—Me parece bien. Estoy con Joong en la biblioteca trabajando, ¿te aviso?

—Estoy cerca, me paso y nos vamos juntos cuando terminéis.

—Como quieras, Pond. Nos vemos ahora.

—¡Hasta ahora, gatito!

—Deja de llamarme...

Pi-pi-pi...

Lo que me faltaba, preocuparme porque Pond usa motes cariñosos conmigo. Tengo que hablar con él; a mí no me haría ni pizca de gracia que alguien llamara de forma cariñosa a mi Joong... mío... ¡me muero de vergüenza!

—Aquí tienes el agua, mi príncipe.

—Gracias, Joong.

—¿Y ese sonrojo tan bonito, a qué se debe?

—No sé de qué hablas.

—Mmm... Te llega hasta las orejitas...

Me da una pequeña caricia en la oreja derecha, y mi corazón se acelera. Me mira los labios. Vamos, Joong, hazlo, por favor. Me muerdo el labio inferior sin darme cuenta, y escucho cómo Joong toma aire y traga saliva antes de apartarse y revisar la lista que seguimos para el trabajo.

Otra vez. Me está volviendo loco... estoy a punto de agarrarlo de la camisa para acercarlo a mi boca. Justo cuando decido actuar, aparece Pond con una cara divertida... ¡prometo que ahora mismo le borraría esa sonrisa de una patada en el trasero!

—¡Gatiiitoooo! ¡Ya estoy aquí!

No puede ser... mis ojos se dirigen a Joong, que sigue mirando la lista. Si no lo conociera, pensaría que ni se ha dado cuenta de su presencia, pero puedo asegurar que no es así. Joong tiene las manos en puños, los hombros tensos, y puedo ver una vena sobresaliendo.

—Deja de llamarme así, Pond.

No estoy mirando a Pond, pero sé que esto lo va a descolocar. Siempre he dejado que me mimara como quisiera. Me gusta sentirme cuidado, y Pond es como un hermano para mí. Pero ahora está Joong, y quiero cuidar esto... lo que sea esto.

—¡Ouh! ¿Desde cuándo te molesta que te llame de forma cariñosa? ¿Te da vergüenza porque está Joong delante? Vamos, sabe de sobra que eres mi gatito.

Su mano rasca mi barbilla, y cuando voy a apartarle de un manotazo, él se retira riéndose.

—Vale, vale, mi gatito está arisco hoy... jajaja...

—Basta, Pond, deja de decir tonterías...

—Deberíamos dejarlo por hoy, Dunk. No me di cuenta de la hora, y debo marcharme ya. Adiós, chicos.

—¡Adiós, Joong!

—Pond, eres tonto. Quédate aquí. Haz el favor de no meter más la pata. ¡Y recoge mis cosas!

Sí, estoy en modo mandón, que se chinche por haber metido la pata.

Salgo corriendo detrás de Joong, intento alcanzarlo, pero lo he perdido de vista...

—¡Joong!

Nada...

—Vamos, Dunk, no te enfades conmigo... si tanto te molesta, dejaré de llamarte gatito desde ya. Mira, aquí están todos tus bultos, los llevo yo hasta tu casa a modo de disculpa.

—Pond... en serio, te quiero mucho, pero a veces no te enteras de nada y metes la pata... vámonos a casa.

—A sus órdenes... ¿vas a contarme qué he hecho?

—En casa...

☀️🌻
—————————————————————
Vota y comenta 🫂

El amor es amor (JoongDunk)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora