El amor es amor (JoongDunk)

🌻Dunk🌻

Estoy sin palabras. No reacciono. ¿Qué me pasa? Vamos, abrázalo, contéstale, haz algo, pero reacciona. ¿Y si piensa que no siento lo mismo? Soy un idiota.

—Tómate tu tiempo, bebé. Sé que soy demasiado intenso... Te prometo que no te voy a presionar, solo no me apartes, no te pido nada más.

¿Que no lo aparte? Dios mío, si yo también siento lo mismo, solo que debo estar roto.

—¿Te importa si salgo a tomar el aire? Estoy un poco nervioso con esto de confesarme y tal... jeje... Perdóname, Dunk, intentaré no tardar mucho, ¿sí?

Lo veo caminar hacia la entrada, donde abre el armario para coger su abrigo. Una vez listo, me vuelve a prometer que no tardará y se va.

En cuanto me quedo solo, noto cómo mis ojos se llenan de lágrimas. Me siento vacío, tan decepcionado conmigo mismo por no haber reaccionado como él se merecía. ¿Y yo? Yo no me lo merezco, soy lo peor. Las lágrimas empiezan a brotar sin control y comienzo a sollozar. Me abrazo a mí mismo, apoyado en la pared más cercana, y me dejo caer. Intento cambiar de pensamientos para detenerme, no quiero que Joong me encuentre en este estado, pero es inútil, no lo consigo.

No sé cuánto tiempo llevo así, solo sé que escucho la puerta. Escondo mi rostro entre mis rodillas, hecho un ovillo, intentando ahogar los sollozos para que no me oiga. Quizá, si no me muevo, no me verá y pasará de largo a otra habitación.

—¡¿Dunk?! ¿Qué te ocurre? ¿Te duele algo, bebé?

Escuchar lo preocupado que está por mí me duele aún más y no puedo contenerme. Mis hipidos y respiraciones agitadas se hacen más evidentes.

—Dunk, cariño, por favor, dime que esto no es por mi culpa... Dios, lo siento tanto. Olvídalo todo, no es importante...

¿Qué? ¡No! ¡Por favor, no! Dejo de abrazarme para aferrarme a él, desesperado.

—Tranquilo, todo está bien. No pasa nada, ¿sí? Ante todo, somos amigos. Siempre me tendrás como amigo, si me lo permites.

—Joong... buaaa... no... no... por favor...

—Calma, respira, pequeño. Todo está bien, olvídalo, solo cálmate...

—No quiero, no quiero, ¡no!

Estoy tan desesperado conmigo mismo que decido actuar. Si no soy capaz de hablar, intentaré expresarlo con acciones.

Joong sigue susurrándome palabras de consuelo, pero solo logran el efecto contrario, así que lo callo con un beso torpe. Apenas puedo respirar, así que inhalo en su boca cada pocos segundos, como si lo estuviera besando tras correr 100 metros lisos. Él me deja hacer lo que quiera, abre su boca y me entrega su lengua cuando nota lo que busco. No solo eso, mientras yo lo agarro, tirando de su camisa hacia mí, él mantiene el control de su cuerpo, como si me diera el poder de todo. Y eso solo me genera más ansiedad.

Lo empujo, me coloco encima de él, mis manos siguen en puños, aferradas a su camisa, y vuelvo a atacar su boca. Lo muerdo, lo beso con demasiada fuerza. Estoy tan desesperado... Y lo estoy pagando con Joong, lo que me desespera aún más. Paso a su cuello y deslizo mi lengua por su nuez.

—Cariño, calma, por favor. Me estás volviendo loco y no quiero equivocarme...

—Te necesito, Joong, por favor, por favor...

—... vas a matarme, bebé.

Me besa tan dulce... Me derrito. Siento cómo toma el control de todo y lo mejor es que pasa de ser duro y ansioso a suave y cariñoso. Esto es lo que significa sentirse amado. Y esto es lo que él merece.

—... yo también lo estoy...

Se detiene, me aparta y me mira. Parece tan sorprendido...

—¿Qué dijiste?

—Que yo... también estoy... enamorado de ti...

☀️🌻
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