Al Final Ella No Está - Spreen

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A medida que continuábamos nuestro viaje, los momentos cruciales que compartíamos parecían dibujar un mapa de emociones que, poco a poco, se convertía en algo más que una simple amistad. Cada vez que Iván me miraba, sentía que la conexión entre nosotros se fortalecía, como si estuviéramos tejiendo un lazo invisible que nos unía más allá de las palabras.

Una tarde, mientras hacíamos una pausa para descansar en una pequeña cabaña, Iván se sentó junto a mí en el porche. El sol comenzaba a ponerse, tiñendo el cielo de un suave tono naranja. En ese momento, el silencio se volvió cómodo y cálido.

━━¿Sabes? ━comenzó Iván, rompiendo el silencio━. Antes de este viaje, me sentía perdido. Mi vida se había vuelto tan rutinaria, y nunca pensé que podría encontrar algo tan… significativo.

Lo miré, sorprendida por su sinceridad. La forma en que sus ojos brillaban al hablar de su experiencia me hizo sentir que había algo más profundo en su corazón.

━━Entiendo lo que dices ━respondí━. También me he sentido atrapada. Este viaje me ha mostrado que hay más allá de las paredes de mi casa.

Esa noche, mientras nos sentábamos alrededor de una fogata, la química entre nosotros se volvió aún más intensa. La luz de las llamas iluminaba su rostro, y había una belleza en su risa que me hizo sentir mariposas en el estómago. En medio de las historias y las risas, nuestras manos se rozaron, y el roce fue suficiente para encender una chispa.

━━A veces, pienso en lo fácil que es perderse en lo cotidiano ━dijo Iván, su mirada fija en la llama━. Pero aquí, en la naturaleza, me siento más conectado. No solo con el mundo, sino contigo.

Su declaración fue un golpe directo a mi corazón. Era como si, en ese instante, hubiera puesto en palabras lo que ambos sentíamos.

━━Yo también ━susurré, sintiendo el calor de sus palabras calar en mi ser.

A medida que las noches se sucedían, también lo hacían los momentos de intimidad. Una mañana, al despertar en la tienda de campaña, la luz del sol se filtraba a través de la tela, creando un halo dorado a nuestro alrededor. Cuando giré la cabeza para mirarlo, lo encontré observándome, una sonrisa en su rostro.

━━Eres hermosa ━me dijo, y su voz sonaba entrecortada por la pereza matutina, pero su sinceridad me hizo sonrojar.

La combinación de su cercanía y esas palabras me llenó de una calidez inexplicable. La idea de que alguien como Iván, con su corazón tan noble y su espíritu aventurero, pudiera sentir algo por mí era abrumadora. Aquel momento fue crucial; sentí que una línea se había cruzado, y el aire entre nosotros se volvió denso con una nueva posibilidad.

Cada risa compartida, cada mirada sostenida por más tiempo del necesario, cada pequeño gesto de cariño empezaba a tejer un vínculo que se sentía irrompible. Mientras ascendíamos hacia el Fitz Roy, cada paso se volvía más significativo, no solo por la montaña, sino por lo que significaba para nosotros como pareja en formación.

En un claro del bosque, mientras descansábamos, decidimos tomar un momento para contemplar el paisaje. La vastedad de la Patagonia se extendía ante nosotros, y en ese silencio, compartimos un instante que se sintió eterno.

━━A veces me asusta lo que siento por ti ━confesó Iván, su voz baja, como si temiera que el viento se llevara sus palabras━. Pero no puedo evitarlo.

Mi corazón se detuvo por un momento. Aquella confesión era el brote de lo que había estado creciendo entre nosotros, una conexión profunda que se estaba arraigando en cada experiencia que compartíamos.

━━No estás solo en eso ━respondí, el nudo en mi garganta liberándose mientras me atrevía a ser vulnerable━. Me siento igual. Este viaje… tú… todo esto me ha hecho darme cuenta de que la vida vale la pena vivirla, incluso con sus riesgos.

Miré a Iván y vi en sus ojos la misma mezcla de miedo y esperanza que sentía.

━━Entonces, sigamos adelante ━dijo, con una sonrisa━. Juntos.

Y en ese instante, mientras el viento susurraba entre los árboles, supe que lo que había comenzado como una simple amistad se estaba transformando en algo mucho más profundo. Estábamos destinados a encontrarnos en este viaje, y cada momento crucial, cada mirada y confesión, solo servían para fortalecer ese lazo que nos unía, llevándonos hacia un futuro lleno de posibilidades y aventuras juntos.

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