Al Final Ella No Está - Spreen

18

━━━━━━━━━━

La noche en el hostal se deslizó entre murmullos y risas suaves. Afuera, el viento aullaba entre las montañas, mientras que dentro de la habitación, la calidez de la lámpara creaba un ambiente acogedor. El aire estaba impregnado de una mezcla de ansiedad y expectativa, y a medida que el silencio se apoderaba del espacio, la tensión entre Iván y yo se hacía palpable.

Nos habíamos acomodado en la cama, sentados uno al lado del otro, y aunque había un abismo de preocupación y el peso de la incertidumbre entre nosotros, la conexión que habíamos forjado era innegable. Cada mirada se volvía más intensa, cada momento en silencio parecía hablar más que las palabras.

━━No puedo dejar de pensar en todo lo que hemos vivido juntos ━dijo Iván, rompiendo el silencio, sus ojos fijos en mí━. Desde que nos encontramos, ha sido como un sueño.

━━Un sueño lleno de desafíos ━respondí, intentando sonreír. Sin embargo, el eco de mis propios miedos resonaba en mi mente.

━━Pero también lleno de momentos hermosos ━dijo, acercándose un poco más. Su voz tenía un matiz de anhelo que hizo que mi corazón latiera con más fuerza.

Las palabras flotaban entre nosotros, cargadas de un significado más profundo. Miré sus ojos, que brillaban con una mezcla de emoción y preocupación, y de repente, sentí una oleada de valentía. La conexión que había crecido entre nosotros, el deseo de estar más cerca, era imposible de ignorar.

Sin pensarlo, incliné mi rostro hacia él. La distancia que había entre nosotros se desvaneció y, en un instante, nuestros labios se encontraron. El beso fue suave al principio, un roce tierno que parecía encapsular todo lo que habíamos compartido. Pero a medida que nos entregábamos a ese momento, la suavidad se transformó en algo más intenso, como si ese contacto breve pudiera aliviar todos nuestros miedos y preocupaciones.

La calidez de su boca era como un bálsamo, y mi corazón se aceleró al sentir su mano suave en mi mejilla, sosteniéndome con ternura. Cada segundo que pasábamos juntos en ese beso parecía un susurro del destino, una promesa silenciosa de que, sin importar lo que pasara, siempre estaríamos allí el uno para el otro.

Cuando finalmente nos separamos, la realidad regresó con fuerza, y la preocupación en sus ojos me hizo recordar la fragilidad de mi estado.

━━Lirio… ━dijo, su voz un susurro cargado de emoción━. No sé lo que pasará mañana, pero quiero que sepas que, sin importar lo que ocurra, quiero seguir uniéndome a ti, a tus labios, a tu vida, hasta el último día que tenga.

Sus palabras me atravesaron como un rayo de luz en medio de la oscuridad. Aunque era consciente de la gravedad de mi situación, su promesa me llenó de un calor reconfortante. La idea de que alguien se preocupaba por mí de esa manera, de que deseaba estar a mi lado incluso ante lo incierto, me hizo sentir más fuerte.

━━Yo también quiero eso, Iván ━respondí, mis palabras sinceras y llenas de esperanza. Aunque sabía que la vida estaba llena de sorpresas, había una parte de mí que quería creer en un futuro donde ambos pudiéramos estar juntos, un futuro más allá de las montañas y los desafíos.

El tiempo pareció detenerse mientras nos mirábamos, y en ese instante, sentí que, sin importar lo que el destino nos deparara, habíamos encontrado algo especial en medio de nuestra lucha.

Afuera, el viento seguía soplando, y las montañas permanecían vigilantes en la distancia, pero dentro de aquella habitación, todo parecía posible. Con una sonrisa, volví a acercarme a él y, en un gesto de complicidad, lo besé nuevamente. Era un pacto silencioso, una promesa de que seguiríamos juntos, sin importar lo que el mañana trajera.

La noche se deslizaba hacia el final, y aunque sabía que el camino no sería fácil, mi corazón latía con la esperanza de que, con Iván a mi lado, podría enfrentar cualquier desafío. La montaña que nos esperaba no solo era un destino físico; era un símbolo de lo que habíamos construido juntos y de todo lo que aún estaba por venir.

━━━━━━━━━━