Capitulo 5

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                              ︵‿︵‿୨♡୧‿︵‿︵
                                      Emily pov:

Las manos de Minho tomaban las mías de una forma tan reconfortante que borraban todos mis miedos y me obligaban a concentrarme en su mirada, la cual era tan profunda que me recordaba el cielo nocturno que cubría el área en este momento.

Era hipnotizante y embriagadora.

Pero después de un rato tuve que romper el contacto al recordar lo tarde que era y al pensar que el chico tenía que ir a descansar porque tenía que levantarse temprano para ir al laberinto.
Él se ofreció a acompañarme a mi cabaña y mientras caminamos compartíamos pequeñas bromas sobre la situación de la mañana, la cual contrastaba drásticamente con la de ahora.

-Descansa, novata -se despidió el pelinegro con una sonrisa cuando llegamos.

-Descansa Minho - dije mientras le devolvía la sonrisa y cerraba la puerta de la cabaña.

Caminé directo a mi cama para poder dejarme caer en ella e intentar volver a quedarme dormida, lo cual no tardó mucho en suceder. Esperaba que la pesadilla que había tenido antes de ir con Minho cambiara y se transformara en un sueño tranquilo, pero claramente eso no pasó y aquellos recuerdos volvieron a mi mente.

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Estaba corriendo entre unos pasillos oscuros y estrechos mientras intentaba escapar de una figura oscura y encapuchada que me seguía de cerca.
No podía observar su rostro, pero sentía su aliento caliente en mi nuca detrás de mí.

Cada esquina que tomaba parecía conducir a otra más sombría. Mi corazón empezaba a latir con fuerza en mi pecho, haciendo que mis piernas me empezarán a fallar, provocando que tropezara y callera al piso, permitiendo que mi perseguidor me logré alcanzar. El me levantó del suelo bruscamente con ambas manos, haciendo que logre ver sus ojos, los cuales brillaban en la oscuridad y me miraban fulminantes.

-¿Por qué lo hiciste, Emily? - dijo en un tono de voz hostil mientras me soltaba -Nos traicionaste - declaró la persona, haciendo que me recorriera un escalofrío por el sentimiento de remordimiento que me consumía.

Intentaba hablarle, pero era inútil, no lograba producir ningún sonido, parecía que me había quedado sin voz.

Era un sentimiento horrible

Justo antes de que pudiera observar su rostro, la habitación desapareció y me dejó en una oscuridad siniestra en la cual solo podía escuchar la misma oración, repetirse una y otra vez

Cruel es Bueno

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Despierto sobresaltada, sentía cómo mi corazón latía fuertemente en mi pecho y la cabeza me daba vueltas. Intentaba asimilar los recuerdos de aquel sueño, por mi mente pasaba el sentimiento de culpa y el miedo que sentí en ese momento.

Parecía tan real que me aterrorizaba.
De pronto llegó a mi mente lo que había hecho esa persona. Me había llamado Emily

¿Ese era mi nombre?

Me levanté rápidamente de mi cama y caminé en círculos por toda la cabaña. No podía creer que ese era mi nombre y que había logrado recordarlo.
En ese momento alguien tocó la puerta y yo me dirigí a abrirla rápidamente, pensando que sería cierto chico pelinegro, pero me llevé una sorpresa al abrirla y ver a Newt del otro lado de la puerta

-Hola, novata - saludo el chico amablemente, pero al notar mi cara de desilusión, me miró preocupado antes de continuar -¿Está todo en orden? -cuestionó el rubio

Yo me recompuse al escucharlo y lo miré con una gran sonrisa.

-Recordé mi nombre -dije sin rodeos mientras se me iluminaba el rostro por la felicidad.

-¿De verdad? - preguntó el chico incrédulo, a lo que yo asentí emocionada

-Wow, felicidades pequeña- dijo alegremente mientras me abrazaba -¿Y cuál es? -preguntó el chico aun abrazándome

-Emily - respondí con una sonrisa de oreja a oreja, ya que el recordarlo era algo que me emocionaba mucho. Había llegado a pensar que tardaría más de una semana en lograr recordarlo.

-Es un lindo nombre, novata - dijo el rubio mientras terminaba el abrazo y me miraba con una sonrisa amable

En eso, un grito de Sartén nos hizo saltar del susto y mirarnos preocupados antes de comenzar a correr a la cocina.

Al llegar, Sartén nos miró hostilmente mientras sostenía una canasta vacía en la mano. Newt al ver la canasta, soltó una risa disimulada antes de preguntarle al chico qué es lo que había pasado.

-Un idiota se acabó todas las moras - exclamó el chico furioso.

Al escuchar la situación, supe la razón de la risa de Newt. Había sido el idiota de Minho

-Tranquilízate, shank, yo me encargaré de ayudarte a buscar al culpable, ahorita mejor termina de preparar el desayuno -Dijo newt en un intento de calmar al chico.

-Está bien -soltó resignando el moreno

-Si quieres, yo te puedo ayudar -le ofrecí al chico amablemente.

El chico aceptó mi oferta y me pidió que cortara unas frutas que usaría para agregarlas a la avena y para preparar un jugo. Eso no me llevó mucho tiempo, así que aproveche y fui a mi cabaña para ponerme zapatos, ya que por la emoción de antes no lo había hecho.

Llegué a la cabaña y me puse rápidamente los zapatos azules que se encontraban debajo de mi cama, la cual también aproveché para recogerla, haciendo que el lugar volviera a estar en orden.

-El desayuno ya está servido, linda - habló alguien y yo supe de quién se trataba sin necesidad de voltear a verlo.

-Voy en un segundo, Gally - dije mientras acomodaba mi cabello en una coleta alta

-Okay, te espero - dijo el chico mientras se recargaba en el marco de la puerta.

Cuando terminé de alistarme, miré a dónde se encontraba el chico y noté que me estaba viendo atentamente.

-¿Ocurre algo? - pregunté confundida

-Nop, nada - dijo el chico mientras alejaba la mirada.

-Bueno, entonces vámonos antes de que se acabe la comida - le sugerí al chico, el cual solo asintió y salió de la cabaña.

¿Le había picado algo?

Mientras caminábamos, recordé que había algo nuevo que no le había contado.

-Se me había olvidado decirte algo muy importante - dije emocionada mientras lo detenía.

-¿Qué ocurre, linda? - preguntó confundido.

-Ocurre que logre recordar mi nombre - dije mientras tomaba una pausa para mirarlo antes de continuar -. Me llamó Emily - exclamé alegremente.

Él me miraba cariñosamente mientras me decía lo emocionado que estaba de escuchar eso.
Al llegar a la cocina, nos dirigimos a una mesa que estaba casi vacía a diferencia de las demás.

Yo tomé asiento y justo cuando Gally se iba a sentar a lado de mí, llegó Newt, ocupando el lugar que pensaba usar Gally.

Gally lo miró molesto mientras se alejaba y se sentaba en otro lugar con un claro disgusto.

-¿Por qué hiciste eso? -pregunté confundida

-¿Hacer qué? -dijo con una sonrisa inocente.

-No te hagas, le quitaste el asiento a Gally

-En ningún lugar dice que sea de él -comentó el chico, haciendo que lo mire con un gesto serio.

Antes de que pudiera decirle algo más, Alby llegó a dónde estábamos y me pidió que fuera con él al terminar de comer. Supongo que era para asignarme el trabajo que haría hoy.

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