The Girl and the Runner

Capitulo 16

Gally bajó para ayudarlo a salir, o mejor dicho, para aventarlo fuera de la caja con una fuerza parecida a la que usó conmigo mi primer día.

Y justo igual que yo, el novato se levantó y comenzó a correr lejos de nosotros.

-Miren eso, tenemos una Emily 2.0 -bromeó divertido Sartén, provocando la risa de los demás.

-Pero les apuesto a que él se va a caer más rápido -solte en broma

Pero poco después de decirlo, el chico se tropezó con una roca y cayó rodando al suelo.

-Le echaste la mala suerte al pobre novato Mily -me dijo Jeff mientras los demás se reían del novato.

-Alguien vaya por él y llévenlo al pozo antes de que quiera seguir corriendo -ordenó Alby y de inmediato dos chicos se dirigieron a dónde estaba el novato para poder encerrarlo.

-Viste que si eres la favorita de Alby, a ti no te encerró como al pobre novato -me dijo jeff mientras caminábamos de vuelta a la enfermería.

-Ya supéralo envidioso.

Justo antes de que llegáramos a nuestro lugar de trabajo, alguien vino y me tocó el hombro.

Giré para observar quién era y cuando lo hice, quedé algo sorprendida al ver que fue Gally

-Alby me pido que te preguntara si podías ayudarnos con los suministros nuevos que llegaron -me dijo el chico en un tono de voz distante.

-Sí, por supuesto -le contesté con una sonrisa amistosa antes de voltear a ver a Jeff -Nos vemos en la tarde, Jeff -dije antes de seguir al rubio a la caja para comenzar a enlistar las nuevas cosas y llevarlas a almacenar.

Era algo tardado porque eran bastantes cosas las que teníamos que revisar y cargar.

Tal vez si fuéramos amigos como antes, el trabajo se volvería más llevadero al tener una conversación de por medio, pero en lugar de eso, el silencio reinaba mientras cada quien se dedicaba a una cosa en específico.

Estuvimos así fácil una hora hasta que uno de los chicos acabó con el silencio. Cuando me escuchó nombrar a uno de los nuevos animales.

-No deberías de ponerles nombre, Emily -me comentó Zart casi a modo de regaño

-Déjala en paz shank -soltó Gally a mi defensa sorprendiéndome

-Yo solo lo dije porque si lo hace les puede agarrar cariño -explico el chico y antes de que Gally volviera a intervenir yo hablé.

-Tienes razón -dije ofreciendo una sonrisa pequeña -. Pero no vas a negar que si tiene cara de llamarse Winston -agregué mientras tomaba la cara de la cabra para enseñársela al chico.

Cosa que provocó la risa de los demás, incluso la de Gally

-Por eso eres mi favorita, pequeña -dijo una voz que acababa de llegar y la cual le pertenecía a Alby

-¿Y el novato? -le pregunté al recién llegado.

-Está con Chuck alistando su hamaca -me explicó el moreno.

Yo solo asentí y continué con mis tareas hasta que escuché esa voz que tanto me encantaba

-Hola, cariño -dijo Minho mientras me abrazaba por atrás y me envolvía en sus brazos

Esa acción provocó que su compañero corredor y los demás chicos rodaran los ojos al verlo tan cariñoso. Cosa que a él no le podía importar menos.

De repente, el momento se rompió al escuchar cómo Gally peleaba con el novato a unos cuantos metros de dónde estábamos, haciendo que algunos se acercaran a ver la escena.

Yo también quería acercarme, pero Minho me detuvo.

-Ya va Alby para allá, deja que él lo solucione -me dijo Minho mientras me tomaba del brazo y me acercaba a él-. Mejor cuéntame cómo te fue hoy.

-Muy bien -respondí con una sonrisa; ignorando la situación de fondo porque sabía que Minho tenía razón y Alby solucionaría el problema con el novato. -Hoy el novato repitió mi llegada, solo que él se cayó, apenas dio unos cuantos pasos -le conté al pelinegro divertida.

-Tu igual lo hiciste, Ems -soltó el chico cuando nos separamos y comenzamos a caminar.

-Claro que no -exclamé mientras empujaba al chico en broma.

-Claro que sí.

-Mentira, a mí me tiró un tonto Shank que no se fijó por dónde iba -afirmé divertida, haciendo que Minho me atrapé en sus brazos y quedemos con una poca distancia entre nosotros.

-Y bien que te encanta cuando te besa ese tonto Shank -declaró el chico con una sonrisa ladina antes de besarme

Yo le correspondí de inmediato, porque vaya que tenía razón el pelinegro.

-Si siguen así, voy a vomitar -dijo Jeff quien acababa de llegar.

Al escucharlo, Minho y yo nos separamos y lo miramos hostilmente.

-Cómo te encanta molestar, Jefferson -le dije al moreno rodando los ojos y separándome de Minho

-Ya sabes, Mily, es mi trabajo como tu mejor amigo -contestó el chico.

-¿Quién te dijo que eres mi mejor amigo? -inquirí en broma, provocando que el chico se lleve la mano al corazón dramáticamente.

-Yo solo venía a contarte el chisme y tú me lastimas -soltó en chico continuando con su drama.

Minho ignoró al chico y depositó un pequeño beso en mi cachete.

-Te veo en la noche, Ems -se despido el chico para después marcharse a la sala de mapas para terminar su trabajo.

Cuando Minho se fue y quedamos Jeff y yo solos, aproveché para darle un golpe suave en la cabeza por la interrupción pasada.

-Ven, vamos a la enfermería y ahí me cuentas el dichoso chisme -dije, comenzando a caminar mientras Jeff se sobaba la cabeza.

-Ahora no te voy a contar nada por pegarme -soltó el chico alcanzándome.

-Ambos sabemos que no puedes guardarte nada -le reproche

-¡Claro que puedo! -se quejó el chico

Y justo como lo dije, al poco rato de llegar a la enfermería, Jeff me contó con lujo de detalle la escena que se armó cuando el novato intentó entrar al laberinto.

-Yo creo que el novato nos va a causar varios problemas y dolores de cabeza -dijo Jeff cuando terminó de contarme la historia

-Pero quiénes somos nosotros para juzgar -añadí utilizando la misma frase que usaba Jeff cuando terminaba de criticar a alguien.

-¡Exacto!

Cuando el cielo comenzó a pintarse de negro, dejamos nuestras actividades y nos dirigimos a la fiesta de bienvenida del novato.

En el camino encontré a Sartén, quien me ofreció una brocheta de carne y vegetales, apenas me vio llegar.

Yo lo acepté y le agradecí amablemente al cocinero para después dirigirme a dónde estaban platicando Newt y el novato.

Creo que ya era el momento de presentarme con él.