CAPITULO 29 : MÓNACO

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《《 Alexander》》

Cinco de la tarde y acababa de aterrizar mi helicóptero ya que era más discreto en la azotea del hotel donde mi esposa se está hospedando

En todo el puto vuelo no puede pegar el ojo el enojo no me dejaba lo que hacía era pensar y pensar estupideces que me llevaron a tener un embrollo

- su maestra no se encuentra en el hotel

- y dónde carajos está - digo cabreado

- la reina se encuentra en el mega yate de su hermano emiliano en compañía de las señoritas Lowi y mercy viendo la fórmula 1

- okay no le hagan saber de mi llegada a la reina

- cómo ordene su majestad

-escuadrón 3 quiero que se mezclen entre la multitud y vigilen a la reina para su seguridad con suma discreción lo entienden

- sí señor - lo dicen al unísono los 20 hombres que conforman el escuadrón 3 de mi ejército de guardaespaldas que velan por mi seguridad

Me giro y subo al ascensor

No me gusta viajar lo odio la mayoría del tiempo donde me encontraba de viaje andaba que mataba todo el mundo

Ya que en ese tiempo por mucho que dijera que la quería lejos me mentía a mí mismo sé que no soportaba estar lejos de ella y siempre quería verla aunque fuera de lejos

Cuando llegaba de mis viajes lo primero que hacía era ir al jardín porque la mayoría del tiempo ella se la pasaba ahí o en su recámara me escondía en medio de los árboles o arbustos y la observaba por horas como un completo acosador y psicópata porque imaginaba muchos escenarios donde la hacía mía y mientras lo hacía me masturbaba viendo su angelical rostro desde lejos

Al cabo de 5 minutos estoy en la habitación en donde duerme mi esposa me quito el saco abro la botella que traje del mini bar que está junto en medio de los muebles en el recibidor de la entrada del penthouse

Me siento en el balcón que me ofrece una amplia vista de Montecarlo

───────༻✦༺───────
Ha pasado 6 horas y nada que llega Janet solo faltan 20 minutos para que sea las las 12 de la noche y estoy comenzando a desesperarme

Maldita sea mujer a qué putas horas piensas llegar

Maldigo mentalmente si no llega pronto a perder los estribos de la poca cordura que me ha costado mantener

Me meto a la habitación cierro las puertas que dan acceso al balcón me despojo de mi ropa y entro a la ducha

Al cabo de 15 minutos salgo del baño encontrándome con la llegada de la dueña del enojo que me cargo desde hace semanas

Le doy una mirada detallada sintiendo como termino de perder la la cabeza y suelto a la maldita bestia que desea salir de una vez por todas y como no si la mujer corrección mi mujer lleva puesto un vestido mangas largas color negro que les llega unos centímetros arriba de las rodillas de escote V profundo que se le pega como si fuera una segunda piel acentuando su magnífico cuerpo

-wow Alex te ves sabroso y ese que tienes como si fuera un chorizo gigante entre las piernas me dan ganas de comer - dice con una sonrisa lujuriosa

- cuánto bebiste Janet

- te digo la verdad creo qué... -finge pensarlo - dos copitas nada más señor esposo

-No seas mentirosa si fueras tomado Dos copas no estarías de esta manera

- y cómo estoy ricura - dice acercándose a mí - porque yo creo que estoy cogible no lo crees

Me susurra pronunciando cada palabra lentamente en mi oído mientras sus manos bajan hasta llegar a mi pene que comienza a sobar de arriba a abajo con su pequeña y suave mano

- estás muy duro mi amor - su lengua le da una lamida a mi mejilla saboreando las gotas de agua que se deslizan de mi cabello - se siente tan rico

- deja de tocármelo quiero hacer algo de lo que después te arrepentirás mañana

- Y tú te arrepentirás después de hacerme tuya - me pregunta para no responder lo que le pregunté primero -dime lo harás

-no nunca lo haría y nunca lo haré me perteneces tanto como en cuerpo como en alma

Suelta una carcajada como si lo que le acababa de decir fuera lo más gracioso del mundo

-sabes me fuera gustado que me dijeras eso el día que me entregué a ti con toda la esperanza de que me correspondiera pero qué hiciste me cogiste y te fuiste como si yo fuera una puta

No respondo porque no tengo con qué justificar me por muy enojado que esté fui y soy un desgraciado que ya está en todo su derecho de reclamarme

Da cinco pasos hacia atrás para separarse de mí y dejar de tocarme

- Alexandra solo lárgate como siempre y déjame descansar

- No miré no te dejaré no esta vez no como siempre y sí sé que soy una mirada un desgraciado y muchas cosas más y sabes no puedo cambiar eso pero puedo tratar de mejorar puede que este matrimonio lo odie pero nadie me puso una pistola en la cabeza para que me casara contigo tuve dos opciones y bien pude elegir no ser rey y continuar con mi cargo en el ejército pero no lo hice sea lo que sea te elegí disque porque quería ser rey pero la verdad es que ese día cuando acepté el compromiso me sentí victorioso y no precisamente por ser rey

Le confieso porque sí la amo y tal vez para ella solo sean palabras vacías pero también sabe que yo nunca le he mentido y todo el matrimonio que llevamos juntos le he sido directo y sincero con ella

- sabes que no te creo - dice - y tampoco quiero intentar creerte

- lo entiendo estás en todo tu derecho

- quiero que me des dos cosas esposo

- soy todo oídos

- quiero que me cojas esposo y te aseguro que no me voy a arrepentir

- quiero que me cojas esposo y te aseguro que me voy a arrepentir

No le respondo y de una le devoró la boca con tanta desesperación y necesidad ella da un pequeño salto y se aferra a mi cintura enredando sus piernas alrededor de este haciendo que su vestido se suba dejando su bello culito al descubierto y como si mis manos tuvieran vida propia empiezan a tocarlo

- extrañé tus manos - gime a centímetros de mi boca

- extrañaste esto - mi mano derecha cruza su trasero por encima metiéndose en su vagina no hace falta decir que está chorreante de la excitación pellizco clítoris y sin espera le meto dos dedos en su estrecho canal

- Mmm si mucho

Me me siento a orillas de la cama con Janet encima de mi regazo bajo mis besos a su cuello le doy pequeños mordiscos disfrazados de chupetones mientras ella se deja llevar por el placer que le proporcionó

Y no sé si odiar el vestido o amarlo porque tengo tanta facilidad en meterle la mano por donde yo quiera sin ningún tipo de restricción pero lo odio porque sé que todas las miradas se posaron en el maldito vestido lo sé mi mujer donde vaya llama la atención por su inigualable belleza

- Maldita sea - farfullo entre besos

- Porque maldices esposo

- Este vestido es una prenda del pecado y tú lo llevas puesto

- Y como sabés que es un vestido pecaminoso

- Porque si lo llevara otra mujer solo atraería miradas de deseo pero tu ya de por sí traes miradas y con este vestido te aseguro que por donde pisaste dejaste penes duros

- Y tú como sabes eso

- Desde que te vi con este vestido estoy que me corro

- Me alegra saber que te gusta el vestido

- oh conejita no me gusta el vestido me gustas tu

Me vuelvo a apoderar de su boca sin darle tiempo de un respiro

Mi bella esposa comienza a moverse encima de mi pene palpitante que se muere por penetrarla

La Realidad De TiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora