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Puse los ojos en blanco y me levanté, cubriéndome con la manta. Levanté mi ropa y fui directo al baño. Minutos después, salí ya vestida, tomé mis cosas y me dirigí a clases. Las horas pasaron volando, y sin darme cuenta, Nick y yo ya estábamos en camino al restaurante para ver a Taylan.

Nick me observó fijamente. —Entonces, ¿deja ver? ¿Tú y Taylan se conocen desde siempre?

—Sí, mi mamá y su mamá eran mejores amigas.

Nick me dio una pequeña sonrisa. —¿Y entre ustedes nunca hubo nada?

Lo vi divertida. —Define nada...

Nick me observó, totalmente sorprendido. —Dime, ¿qué pasó entre tú y Taylan?

Me llevé una mano a la cabeza. —Nada, fue platónico... y fue mi primer beso —dije en voz baja.

—¿Qué? —dijo Nick, sorprendido.

Tragué saliva. —   Él se iba a ir a la universidad, yo tenía catorce años, y no lo correspondió. Me dijo que era una niña. Fue patético... y un mal beso.

Nick me observó, totalmente sorprendido, con los ojos abiertos y las cejas alzadas. Su boca se entreabrió ligeramente, como si buscara las palabras adecuadas. —¿Te gusta aún? —preguntó, mientras se cruzaba de brazos, nervioso.

Negué con la cabeza. —No. Además, las cosas con Logan están bien.

Nick hizo un gesto de desacuerdo, frunciendo el ceño—También que encontraste un condon en su baño, cuando tu estas tomando pastillas 

Rodeé los ojos y le di un pequeño golpe en el brazo. —Eso fue antes de estar juntos. Las cosas están mejor ahora...

—Claro, engañaste todo lo que quieras —respondió Nick, con una sonrisa burlona.

Lo miré seriamente. —Nick, no le menciones esto a Taylan. Él conoció a Logan y no tiene una buena impresión de él.

Nick me observó divertido. —Vaya, entonces no soy el único que no le agrada Logan y sus amigos extremadamente tóxicos.

Le di una mala mirada. —Cállate. Ya llegamos al restaurante.

Nick y yo entramos y fuimos directo a la mesa donde estaba Taylan. Él se puso de pie al verme, me dio un abrazo y un beso en la mejilla.

—Hola, rojita —dijo amablemente, sonriendo.

—Hola, Taylan. Este es Nick —respondí, señalándolo.

Nick le dedicó una sonrisa amigable. —Hola, Taylan

Taylan le devolvió el saludo con un gesto y, después de intercambiar algunas sonrisas, los tres nos sentamos en la mesa.

—Oye, Nick, debes de tener historias interesantes de Mare, porque estoy seguro de que la locura y su lado impulsivo no han salido de su sistema, así como su adicción a la cafeína —dijo Taylan, viéndome fijamente.

Nick me vio divertido —No, ninguna. Creo que su lado espontáneo y divertido se lo quitó Logan

Le di una mala mirada, sintiendo que había cruzado una línea. Con una sonrisa inocente en mi rostro, la típica "cara de ángel" que no daña a nadie, le di una patada suave por debajo de la mesa.

Nick se quejó, frotándose la pierna con una mano mientras ponía una expresión de exagerado dolor en su rostro.

Taylan me observó divertido, claramente sabía que lo había golpeado por debajo de la mesa, y luego miró a Nick con una sonrisa burlona. —Vamos, ¿pero por qué te quejas de su adorable novio? —dijo con sarcasmo, levantando una ceja mientras se cruzaba de brazos

Cómo romper un corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora