Desesperación

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Dedicado a todos ustedes, bellas personitas ❤❤💗✨


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Cuando Lilith fue a llevarle la comida a Aziraphale, le sorprendió ver que no había guardias en la puerta, entró y tiró la bandeja al suelo al ver a Edén trepar su cuna y estando a punto de caer. Aunque logró atraparlo a tiempo, el pequeño príncipe no pudo evitar llorar por el susto.

La joven volteó a todos lados, en busca de Aziraphale. No tenía sentido, por mucho que quisiera salir, no dejaría a sus hijos solos.

Salió y llamó a los guardias más cercanos que encontró, ordenando buscar a Lord Aziraphale por todos los rincones del castillo, también ordenó llamar a Muriel y Amón, pues aunque quería sumarse a la búsqueda, no podía dejar solos al príncipe y a la princesa.

-¿Han visto a Aziraphale?- Les preguntó.

Ambos negaron.

-No, hemos estado en el harem desde que su majestad permitió que sus hijos se quedaran con él.- Respondió Muriel preocupada.

Por un momento Lilith pensó que quizá ellos lo habían ayudado a escapar, pero no tenía sentido, como pensó antes, Aziraphale nunca dejaría a sus hijos solos y ellos decían la verdad, ella misma y la señorita Uriel los habían visto siguiendo sus obligaciones en el harem.

-Esto es grave.- Dijo ella.- Cuiden a los príncipes, tengo que informarle a su majestad de esto. Algo no está bien.-


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En el jardín, Adam estaba practicando espada con un muñeco de paja, cortándolo en tajo, haciendo que volaran trozos de tela y heno. Estaba bastante enojado con la situación; con su madre porque sabía las intenciones detrás de las acusaciones, con su hermano porque técnicamente, su madre había dicho la verdad y la había castigado a ella ¿Porque simplemente no dijo que fue un malentendido? Ella estuvo mal pero ¿Era necesario expulsarla para siempre? Lo peor es que no podría visitarla en un largo tiempo, pues había empezado su formación para ser gobernador de una provincia y ella nunca más podría visitar el palacio imperial ¿Por qué su madre estaba tan resentida? ¿Por qué su hermano favoreció a un esclavo antes que a una dama? ¿Por qué vivía en un sistema que estaba diseñado para apuñalarse entre familia? No es que le desagradara Aziraphale, había convivido muy poco con él y le pareció una persona cariñosa, pero no pudo evitar creer en que si había traicionado a su hermano y cuando resultó ser verdad que sí se encontró con ese Alfa a solas, pues le dio para pensar, aún si ellos afirmaban no haberse tocado.

-Adam.- Escuchó tras él, era su hermano.

-Majestad.- Guardó la espada y se inclinó.

-Entiendo que estés molesto, yo también lo estoy, no contigo; con toda la situación en general... yo... -

-Entiendo que tu y mi madre nunca se agradaron, pero ¿expulsarla? Al final ella no dijo ninguna mentira, aún si su intención no fuera la más noble.-

-¿Estás consciente que una acusación así me vería obligado a matar a mi concubino? Pensé que al ser mi hermano sabrías que para mi es más que otra posesión valiosa de mi harem, lo amo. Matarlo sería como matar una parte de mi.-

La Manzana del EmperadorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora